Cuidado los ultras atacan
I.-
Venezuela es un país para querer, aunque en ella se dan cosas inéditas en otras naciones, las cuales dejan perplejos a propios y cristianos… Por ejemplo, los factores oposicionistas de la política venezolana se pueden encontrar en el menos cuatro vertientes del antipensamiento, a decir: a) oposición democrática antigobiernista (esto que puede ser paradójico, ya lo entenderán más adelante); b) oposición fascista de derecha, antidemocrática; y, c) oposición bolivariana fascista de izquierda dentro del gobierno.
Tenemos, entonces que b) y c) pretenden que caiga el gobierno para tomar el Poder pero por distintas razones. Los fascistas de derecha, para imponer un modelo autoritario, militarista de corte Pinochetista y los de la izquierda fascista, para imponer un modelo estilo Pol Pot, que busca la destrucción del actual status quo para comenzar a construir lo que ellos llaman socialismo desde cero. Creo que ante esto, el presidente Hugo Chávez F., es reo de sus propias inconsistencias en materia política y doctrinaria. Cree haber encontrado un guía y un apoyo en la “revolución cubana” y en sus líder Fidel Castro, quien por su edad ya está incapacitado para gobernar e imprimir temor a su pueblo (talvez por eso, el pragmático Raúl Castro, lanzó un puente hacia EE.UU., país que, lamentablemente, está gobernado por un miembro de la derecha más reaccionaria del Partido Republicano); Castro nunca ha ayudado a nadie y ha usado a muchos. Recordemos que muchos de sus lugartenientes en la guerrilla cayeron en desgracia, desaparecieron o fueron a la cárcel solamente por pensar diferente a él. Castro, al desaparecer la URSS, coqueteó un tiempo con la República Popular China hasta que esta se le tornó capitalista (en China existe el único Partido Comunista capitalista del mundo). Luego, se encontró con el líder venezolano, quien creyendo que la solidaridad socialista se hace fuera de casa y no con sus propios pobres, le ha estado apoyando con cuatro mil millones de dólares al año. De esa manera, se está manteniendo el moribundo proceso cubano, el cual, al parecer, no alcanzará a cumplir medio siglo.
II
Pero, volviendo a la oposición fascista de derecha en Venezuela, debemos concluir de que esta está jugando con fuego. Y, lo peor de todo, es que ni siquiera está defendiendo los iontereses del “imperio”, sino que los de una burguesía incontrolablemente sedienbta de dinero a como dé lugar. Pienso que es un error pensar que las multinacionales no creen ni quieren al gobierno de Chávez, todo lo contrario. Nunca antes las multinacionales (neoliberalismo puro) habían sido mejor tratadas que durante los casi nueve años de gobierno revolucionario. Nunca antes, habían vendido tanto a Venezuela, que ya está cercana a los 28 millones de habitantes, lo que significa más comercio, más ventas, más dinero… Por eso, no me imagino, por ejemplo, a VenAmCham |- Cámara Venezolano Americana de Comercio e Industria, conspirando en contra del gobierno. Esta idea, se la han vendido al Presidente sus cogobernantes de la ultraizquierda fascista enquistada en el Poder; así de simple…
VenAmCham no cree que Venezuela pueda enrumbarse a un modelo comunista puesto que el pueblo venezolano rechaza, dicen ellos, mucha de las prácticas que representan este estilo de gobierno y en consecuencia si bien existe una relación importante entre el Líder y las masas, ésta se ha visto mermada cuando se adoptan medidas que atenten contra las libertadles y derechos del pueblo.
III
Por eso, cuando vemos a sectores de la ultraderecha golpista y fascistoide aupando una devaluación artificial del bolívar, cuyo valor lo han colocado, en el llamado mercado paralelo a dos veces superior al valor del dólar controlado, me llama poderosamente la atención debido a que este país tiene una Balanza de Pagos favorable en más de seis mil millones de dólares, con un aumento del PIB de un 12% (ahora bien, estemos claros: que aumente el PIB en un país, no significa que disminuya la pobreza pues ésta tiene que ver con la repartición de la torta), y una inflación de más o menos un 20% lo que situaría el crecimiento anual entre un 7 u 8 por ciento para 2007. Por otro lado, aunque las previsiones digan que la caída de la producción de petróleo podría llegar a apenas 2,3 millones de barriles diarios, el país tiene asegurada una entrada de cerca de 60 mil millones de dólares para 2007 y, talvez, un poco más para 2008, todo lo cual generaría reservas, que en el peor de los casos no declinarían más allá de 25 mil millones de dólares, aunque las importaciones sigan aumentando como lo han hecho hasta ahora.
Por otra parte, el endeudamiento de la República, en estos últimos 8 años han permitido un ingreso extra de unos 75 mil millones de dólares por concepto de deuda interna y externa, la cual se está cancelando religiosamente y, como es sabido, ya el país, a pesar de que el Presidente habían dicho que Venezuela se retiraba del Banco Mundial y del FMI, ahora dio un paso atrás y no lo hará por una razón muy sencilla, esos organismos avalan los bonos de la deuda.
Los bonos han servido para la especulación con la moneda extranjera y han jugado un rol importante en la fuga de capitales, lo cual puede ser contrarrestado, si el gobierno lo quiere, con una Ley de Renta Presunta, que obligue a los compradores, a los inversionistas, a probar de dónde ha salido el dinero de sus inversiones; por otro lado, sería bueno controlar los préstamos avalados por Fonpymy, Banfoandes, Banco Industrial, y otros organismos prestatarios del Estado, para saber cual es el destino de los dineros que deberían estar trabajando en el sector productivo y no especulativo. Con esta Ley de Renta Presunta, se podría establecer de dónde salen los dineros de los nuevos ricos del país pues es imposible que con sueldos de ministros, diputados, viceministros, generales, directores, etc., se pueda llegar a crear imperios económicos de la noche a la mañana. Hay que investigar a Municipios y gobernaciones en cuanto a sus inversiones y, muchas veces, se hará necesario investigar a los investigadores. En otras palabras, se hace necesario establecer una suerte de Policía Económica, con los mejores profesionales para que sepan atacar la corrupción desde todos los ángulos pues ésta socava la integridad no solo económica de la nación, no solo política y social, sino que destruye los valores éticos de la población, la cual, al final del día termina por creer en nada…
IV
Con la reconversión cambiaria, han salido a la palestra “dirigentes” del Partido de Gobierno a decirle al pueblo que con la reconversión “por fin volverá el dólar a Bs. 4,30; en otras palabras, estos imbéciles de la ultra, le están vendiendo al pueblo la idea de una devaluación del 100% de la moneda nacional. No es posible que estos ignorantes de ultraizquierda le hagan el juego a la ultra derecha fascistoide. ¿Será por eso de que los polos se encuentran?
Pienso que nadie en su sano juicio quiera ver la economía de su nación destruida por muy oposicionista que sea. En economía hay un axioma que dice “destruir es fácil, lo difícil es construir” y al parecer, en esto andan ultra izquierdistas y ultraderechistas. Los gobierno jamás se van o caen por motivos económicos. La quiebra de Argentina por ejemplo (que sigue siendo un país en “default”, lo único que logró fue el “corralito”, movida bancaria gubernamental que terminó hasta confiscando las pensiones de los ancianos. Por eso, ¿quiénes pierden con una mala economía? – Los gobiernos no, sólo el pueblo, nadie más.
Al presidente Chávez, aún le quedan algunos años en el Poder. No importa que cambie la Constitución y que la haga a su gusto ¿acaso, algún gobierno venezolano ha respetado las constituciones? – ¿Acaso las constituciones no han sido letra muerta o una palabra para nombrar avenidas y plazas? – En estos años que le quedan aún hay tiempo de rectificar y en ese tiempo, sin cacería de brujas, sino que democráticamente, puede operarse de los cánceres del fascismo de izquierda y del fascismo de derecha, como lo han hecho Lula, Bachelet y Vásquez.
V
Finalmente, debemos establecer claramente que la economía no mata naciones ni cambia gobiernos. Eso es potestad de la democracia y de nadie más. Por eso, no hay que temer a las divergencias y a las opiniones encontradas. Ojalá haya cada día más discusión a pesar de los muchos oídos sordos que se encuentran de parte y parte. Quienes juegan al quiebre económico de una nación, simplemente no quieren a su país, así de simple.