En un combate muy cerrado, celebrado en el hotel MGM Grand de Las Vegas, Floyd Mayweather derrotó por decisión unánime de los jueces al filipino Manny Pacquiao y se hizo poseedor del título de los pesos welters de la AMB, CMB y OMB.
Pacquiao, desde el inicio del careo, llevó la ofensiva, en incluso en el cuarto asalto le colocó un gancho de izquierda a la mandíbula de Mayweather, pero el estadounidense con su buena manera de caminar el cuadrilátero supo pasar las embestidas del filipino, y además de conectar su jab de izquierda y su gancho de derecha a la humanidad de su oponente.
Quizás el estilo de Mayweather no permitió un intenso intercambio de golpes que llevase una mayor emoción.
Ninguno de los púgiles sufrió caída alguna, ni tampoco hubo caídas.
Los jueces del combate, todos estadounidenses, que tuvo como escenario el MGM Grand Garden Arena, de Las Vegas (Nevada), dieron ganador a Mayweather Jr. con los sigueintes puntajes en sus tarjetas: 118-110 que entregó Burt Clemens, por su parte Dave Moretti y Glenn Feldman dieron 116-112 cada uno.
Estrellas de cine como Robert Deniro, Jon Voigt, Ben Afleck, Michael Keaton, Bradley Cooper, además de glorias retiradas del deporte, como los ex tenistas Steffi Graf y Andre Agassi, los el ex basquetbolistas Michael Jordan, Earvin “Magic” Johnson, Reggie Miller, el músico Sting y Paris Hilton fueron algunas de las personalidades que presenciaron en zonas cercanas al cuadrilátero el combate por el título de los pesos Welters entre el filipino Pacquiao y Mayweather. Extrañamente antes del combate hubo la interpretación del himno de México, de parte de un cantante de nombre Julio López (sería en honor a la cerveza Tecate, una de los patrocinantes del combate).
Luego del careo Pacquiao señaló que él creía haber ganado, mientras que Mayweather, muy comedido, dijo que fue una buena pelea.
Al conocerse la decisión de los jueces hubo abucheos, pero en realidad Pacquiao no pudo descifrar el evasivo estilo de Mayweather, que aunque recibió algunas buenas manos, conectó más que su contrincante y merecidamente se llevó el triunfo.
