Nadie se lo esperaba. Sabían que Tyrone José González, mejor conocido como Canserbero, tenía problemas de esquizofrenia y que hacía tiempo que no se tomaba los medicamentos. Sabían, además, que estaba en medio de una fuerte crisis depresiva. Sin embargo, nunca imaginaron que su episodio llegaría al punto de enlutar al mundo del rap y del reggae nacional el mismo día.
Carlos Molnar, bajista de la agrupación Zion TPL, invitó a González a pasar una temporada en su vivienda, mientras superaba su crisis emocional. Allí, el bajista residía con su novia, su hijo y la hija de su novia.
«No era la primera vez que Carlos y Natalia lo ayudaban, ellos estaban asociándose, habían hecho una gira por Chile y Argentina porque Carlos iba a ser el productor de Canserbero, pero él tenía una crisis muy fuerte y Carlos nunca esperó que lo fuera a atacar de esa manera. Él murió ayudando a otra persona, y en su propia casa», dijo a Contrapunto uno de los familiares desde el lugar del hecho.
La madrugada de este martes, Tyrone tocó la puerta de la habitación en la que descansaba su amigo y, luego de una fuerte discusión, lo apuñaló hasta la muerte y luego se suicidó, saltando de la ventana de la cocina del apartamento, en el piso 10 del edificio, ubicado en una urbanización de Maracay.
Aún se desconocen los motivos de la discusión que llevaron al cantante a terminar con la vida de ambos artistas. En las redes sociales abundan teorías que incluyen desde abuso de drogas hasta posibles infidelidades, pero hasta ahora ninguna ha sido confirmada por las autoridades.
Por su parte, Guillermo Améstica, cuñado de Molnar, dijo a Globovisión que descartaba que el crimen tuviera razones pasionales, debido a que los músicos «tenían buenas relaciones personales y laborales».
