Venezuela pasó de las sombras a ser el “mero macho” de América
El año 2015 quedará grabado en la memoria de todos los venezolanos como la etiqueta del regalo histórico deportivo más importante conseguido en ámbito internacional alguno por parte de una selección, un presente trabajado a sangre, sudor y lágrimas, con las manos de la combinado nacional de baloncesto.
La gloria del Preolímpico de México terminaría cayendo en el seno de un elenco humilde, que llegaba con grandes ausencias y dudas hasta de sus mismos fanáticos, que jamás imaginaron el estruendoso golpe de mesa que terminaría dando los dirigidos por Néstor “Che García, un entrenador extranjero que se ganó ser alabado como una deidad por el baloncesto nacional.
En un torneo plagado de estrellas por parte de algunas de las mejores selecciones del mundo, jugadores que hacen vida en las mejores ligas del mundo y con selecciones acostumbradas a brillar en el ámbito internacional, la lógica indicaba que Venezuela cumpliría un papel meramente participativo, sin embargo, con un enorme trabajo de jugadores y cuerpo técnico, el equipo a priori “cenicienta” lograría transformarse de forma inédita en los “Conquistadores de México”
Venezuela llegaba a tierras aztecas con el único aval de ser un equipo aguerrido y solidario. Con la ausencia de Greivis Vásquez, el combinado tricolor ensanchó su protagonismo en el tabloncillo un poco más allá de un solo hombre, haciendo del trabajo en equipo la clave principal en cada uno de los encuentros disputados.
Los criollos fueron desarrollándose con el porvenir de cada encuentro. Se aprendió a ocultar las debilidades (altura) mejorando su fortaleza (defensa), y esto aunado a cualidades inesperadas (rebotes, mejor manejo del balón) terminaron catapultando al equipo a llevarse su primer torneo
El camino a la gloria
Venezuela tomó el buen camino e inició el Preolímpico FIBA Américas de México con un triunfo contundente 73-52 contra Cuba, durante la primera jornada del Grupo B. Para el segundo duelo del grupo, los nacionales verían su primer gran escollo a superar en la figura de Puerto Rico, a quienes también despacharían en un brillante juego de defensa y ataque colectivo con pizarra de 74-63.
Tras este par de victorias y vistoso juego colectivo, especialmente en defensa, la selección recibiría su primera dosis de realidad en su tercer encuentro ante la plantilla con más luminarias del evento: Canadá. Los norteamericanos, a través de su quinteto NBA, tumbaron el cuartel defensivo venezolano con claro marcador de 82-62.
La sombra de la derrota volvería a tapar el talento criollo, esta vez ante otra de las favoritas, Argentina, quien sacó pecho a su favoritismo para superar al combinado vinotinto 77-68. Con estos dos reveses, Venezuela cerraría su calendario en su grupo. No obstante, gozarían de una dulce e inédita venganza más adelante ante ambos elencos después.
La selección iniciaría su andar en segunda ronda con una victoria ante Republica Dominicana con marcador de 72-68. Pese al triunfo, los criollos volverían a complicar su panorama, esta vez al caer ante el anfitrión México en un igualado encuentro 73-70 y contra Uruguay 77-75, dejándolo solo con posibilidades de avanzar ganando su encuentro ante Panamá.
Volviendo a su mejor versión en el evento, los dirigidos por el “Che” no decepcionarían y se impondrían ante los panameños 75-62, sellando así su pasaje entre los cuatro mejores del certamen junto con México, Argentina y Canadá.
Un pasaje para la historia
El combinado venezolano se enfrentaría en las semifinales contra un rival agrandado desde el inicio del torneo y que ya le había dado una pequeña muestra de su enorme talento. Canadienses y criollos abriría una de las dos llaves de las semis que definirían el primer boleto para Rio 2016.
Con un cierre digno de script de película, una falta con .03 décimas de segundo en el reloj, y un hambre insaciable por hacer historia, los dirigidos por Néstor García hicieron la hombrada para imponerse en un duelo dramático a la potencia norteamericana 79-78, en un partido que quedará en la memoria de todos la sobresaliente actuación de Heisler Guillent, quien se erigiría como el gran héroe de la noche con varias bombas detrás del arco de tiro de tres que pondrían a Venezuela a soñar con un triunfo que al final se llevó gracias a un tiro libre de Gregory Vargas.
El pasaje a los Juegos significó para Venezuela reunirse nuevamente entre los mejores del mundo 23 años después, tras Barcelona 1992.
Titulo inédito
Con la victoria ante Canadá, Venezuela llegaría a la final del torneo con una actitud agigantada yel estado de ánimo en la estratósfera. Se enfrentaría contra otro verdugo suyo en ronda regular, Argentina, quien depositaba una gran cantidad de esperanza de obtener el título en su estrella Luis Scola, otro flamante NBA.
Con una defensiva endemoniada y un certero ataque, los criollos se comerían todos sus fantasmas para, contra todo pronóstico, vencer a Argentina por 76-71 en la final del torneo, conquistado así su primer campeonato en esta justa.
El triunfo colocaría a Venezuela junto al selecto grupo de campeones del certamen en el que están Estados Unidos, Brasil, Argentina, Puerto Rico y México.