Tres venezolanos en los planes de los Bravos de Atlanta
El equipo Bravos de Atlanta está en reconstrucción. Al menos eso es lo que ha dicho su nueva gerencia en las últimas semanas, al hacer una serie de movimientos que buscan abrirle paso a la generación que se está desarrollando en las granjas de la organización. Parte de esa nueva camada la integran tres venezolanos, que fueron seleccionados como miembros del equipo Todos Estrellas de las menores del club en 2014.
Del trío, José Peraza es quizás el nombre que primero haga el grado como grandeliga. El segunda base viene de estafarse 60 almohadillas entre clase A fuerte y doble A, además ligó para .339 en esas categorías.
En la novena de Georgia lo ven como el camarero del equipo en el corto plazo y quizás como ese primer bate que tanto ha necesitado el club en tiempos recientes.
“Lo veo como un titular en grandes ligas en el futuro”, destacó Aaron Holbert, manager del criollo en doble A, a MiLB.com. “José tiene algunas cosas que trabajar, especialmente en lo que respecta a su defensa en la segunda base (se mudó a esa posición en 20014), pero debido a su ética de trabajo no creo que le vaya a tomar demasiado tiempo acostumbrarse”.
Peraza pertenece a Cardenales de Lara en la LVBP.
El siguiente en la lista es Williams Pérez. El derecho fue una de las piedras angulares de la rotación de su equipo en doble A en esta campaña con 2.91 de efectividad en 133 entradas de labor. Además de dejar una relación de 2.6 boletos por cada nueve innings trabajados y 1.8 de outs de rolling y fly.
“Su mejor pitcheo, el que creo es el número uno, es el sinker”, señaló Holbert. “Ese pitcheo es tan bueno en él, que para los bateadores debe ser frustrante el saber que lo va a lanzar, que te lo va a poner en la zona y todavía así no pueden hacer nada en contra de él”.
Pérez es reserva en Venezuela de Caribes de Anzoátegui.
Finalmente, Yean Carlos Gil cierra el grupo. El zurdo logró en 2014 demostrar que si está saludable puede hacer grandes cosas. Luego de recuperarse de una cirugía Tommy John que le limitó a sólo 49.1 innings entre 2012 y 2013, el serpentinero estableció topes personales en entradas lanzadas en 2014, con 126.1 en clase -A. Además dejó 3.35 de efectividad.
“Gil es muy inteligente. Está consciente de qué tipo de lanzador es. Él sabe que no sorprenderá a nadie con la velocidad de sus envíos, pero si necesita tirar una pelota rápida lo va a hacer. No va a tirar 97 mph, pero con 94 mph es suficiente para cumplir con su trabajo”, explicó John Schuerholz, presidente del equipo. “Todos sus pitcheos, los rápidos, el cambio y los quebrados puede colocarlos en cualquier lugar de la zona de strike y no teme usarlos en cualquier cuenta. Realmente estamos complacidos por lo hecho por él este año”.
Gil es ficha de los Tiburones de La Guaira en la LVBP.
Si el desarrollo de estos tres jugadores continúa de la manera que se ha ido presentando, es probable que Atlanta cuente con ellos para el futuro próximo, al menos ya lo consideran, al incluirlos en el roster de 40.
