Cada vez que se le pregunta a Eugenio Suárez sobre sus jonrones, él siempre responde que solo está tratando de tener buenos golpes y que no se preocupa por la cantidad.
Aunque el domingo no podía dejar de sonreír pensando en el significado del jonrón.
Suárez conectó un cuadrangular de dos carreras en la tercera entrada. Fue su cuadragésimo de la campaña. Se convirtió en el sexto jugador de Venezuela en golpear 40 cuadrangulares en una temporada, uniéndose a Andrés Galarraga, Miguel Cabrera, Richard Hidalgo, Tony Armas y Carlos González.
Es la mayor cantidad de cuadrangulares de un tercera base de los Rojos, superando los 39 cuadrangulares de Tony Pérez en 1970.
«Galarraga fue uno de mis jugadores favoritos», expresó Suárez, quien estableció un objetivo de pretemporada de batear 40 jonrones.
El venezolano es el primer bateador de los Rojos con 40 estacazos desde que Adam Dunn bateó esa cantidad en 2007. Para las estadísticas es el mejor bateador diestro desde que Greg Vaughn tuvo 45 jonrones en 1999.
Sus cuatro decenas de bambinazos son el quinto lugar por un tercera base de la Liga Nacional desde 2000. Adrían Beltré lidera la lista con 48 jonrones en 2004 cuando jugó con los Dodgers. Con un mes restante en la temporada, Suárez está fijando sus objetivos en el récord venezolano de Galarraga de 47 jonrones de 1996.
«Cuando estás con Galarraga, Miguel, Hidalgo, esos peloteros así, son jugadores poderosos de Venezuela», expresó Suárez. «Hoy fue un jonrón realmente especial para mí».
Eugenio sale del juego
Al final del viaje por carretera más largo de la temporada, que incluyó un par de dobles en los últimos dos días, los Rojos ganaron su último juego, pero tuvieron otra derrota.
Pocas horas después de que Eugenio Suárez celebrara su cuadragésimo jonrón de la temporada, alcanzando una marca personal, dejó el segundo juego de la doble cartelera del domingo después de ser golpeado por un lanzamiento en el dorso de su mano izquierda en la quinta entrada.
Suárez será examinado en Cincinnati el lunes por la mañana una vez que la inflamación disminuya.
«No me siento bien con esto, pero entiendo que esto es béisbol», dijo Suárez
que llevaba un aparato ortopédico sobre su mano izquierda en el club después. «Así es como me lanzaron. Solo quiero decir poner todo sobre Dios y ver si estoy de regreso este año».
«No sé nada en este momento», indicó el venezolano. «Solo me duele un poco la mano y me duele. Veremos qué pasa mañana».