Cavani se carga sobre sus hombros los goles del PSG
El comienzo de temporada no ha podido tomar un mejor curso para Edison Cavani, quien a la sombra de algunas estrellas como Zlatan Ibrahimovic o el recién llegado Ángel Di María, esta demostrando, casi en silencio, una efectividad esplendorosa de cara al arco rival , que lo ha llevado hasta ahora a ser el máximo goleador del París Saint-Germain.
En el inicio este martes contra el Malmö sueco en la Liga de Campeones, el artillero uruguayo consiguió el último tanto de un triunfo 2-0, por parte del club parisinos. Cuatro días antes había conseguido los dos de su equipo en el empate 2-2 con el Burdeos en la quinta jornada de la liga francesa.
Ibrahimovic, por contra, continúa a la espera de su primer gol en un comienzo de campaña marcado por los problemas físicos (esguince de la rodilla derecha y un dolor abdominal) y en el que ha llegado a perderse hasta cuatro partidos.
Cavani ha asumido la responsabilidad y ha firmado seis tantos en siete partidos, teniendo en cuenta todas las competiciones. Justo antes de sus dos tantos ligueros ante el Burdeos había conseguido otros dos en la victoria 3-0 sobre el Mónaco.
El uruguayo ha arrancado por lo tanto bien su tercera temporada en el París Saint-Germain, con lo que acallado por el momento las voces de sus detractores, que en la campaña pasada se dejaban escuchar ante cualquier mala racha.
El «Matador» ha firmado 62 goles en 103 partidos con el club de la capital francesa, un balance positivo para un jugador que tiene que compartir ataque con Ibrahimovic. Este año incluso se vería desplazado a la izquierda ante la llegada de Di María.
De ese tridente ofensivo, Cavani es el que parece el comodín para Laurent Blanc, teniendo que adaptarse a las características de los otros dos.
Números «Matadores»
Las buenas estadísticas de Cavani son a menudo una recompensa al esfuerzo y al trabajo: unos 60% de sus goles llegan en las segundas partidos. Es un jugador infatigable, que sabe aprovechar el cansancio de los defensas rivales para encontrar espacios en los momentos decisivos de los partidos.
Puede que el uruguayo no tenga una técnica espectacular como Ibrahimovic, Di María o incluso Javier Pastore, pero el exjugador del Nápoles no pierde nunca el olfato anotador, el argumento principal de un delantero de sus características.
«Para un atacante siempre es importante marcar, los delanteros viven para eso. A veces parece que sólo tenemos ambición, ganas de marcar, pero es nuestra manera de contribuir al éxito del equipo. Marcar goles aporta al equipo», expresó el artillero tras el juego ante el elenco sueco.
Tras su tanto del martes, lo celebró uno a uno con sus compañeros, en un gesto de jugador de equipo. Se dirigió también a la cámara y gritó «Es para vos, papá», en alusión a la noticia de la liberación de su padre el lunes.
Los más pesimistas vaticinaban para él una temporada entre sombras y dudas, pero por el momento ha empezado brillando y cumpliendo el trabajo que se espera de él en el Parque de los Príncipes.
El Matador está de vuelta.