Djokovic se instaló en semis y se verá las caras con Cilic
El serbio Novak Djokovic, número uno del mundo, cumplió con los pronósticos y pasó este martes a las semifinales del Abierto de Estados Unidos tras vencer en cuartos por 6-1, 3-6, 6-3 y 7-6 (7) al español Feliciano López, decimoctavo cabeza de serie.
El partido, que duró dos horas y 39 minutos, permitió a Djokovic mantenerse invicto frente a López en los seis duelos que han disputado, el último había sido en el 2012 durante el torneo del Masters de Shanghai.
Djokovic, que alcanzó las semifinales del Abierto por noveno año consecutivo y busca su segundo título, que ganó en el 2011, tendrá como próximo rival al croata Marin Cilic, el campeón defensor que en cuartos venció por 6-4, 6-4, 3-6, 6-7 (7) y 6-4 al francés Jo-Wilfried Tsonga, número 19 del mundo.
Ambos jugadores se han enfrentado 13 veces anteriormente sin que Cilic le haya podido ganar todavía al número uno del mundo.
«Ahora lo único que pienso es en descansar, tener dos días sin jugar, algo muy importante en el Abierto, y luego pensaré en el partido ante Cilic», declaró Djokovic al concluir el encuentro frente a López. «Esta noche me he enfrentado a uno de los mejores jugadores que saca y sube a la red en el circuito y ha sido un partido muy duro».
A pesar que lo comenzó muy bien y todo lo contrario para López que falló con su saque y el número uno del mundo lo aprovechó al máximo al hacerle dos breaks (segundo y cuarto juego) lo que le permitió ganar con facilidad la primera manga.
Pero todo cambió en el segundo con López que comenzó a hacer valer su gran servicio, subió con decisión a la red y le hizo a Djokovic el break que necesitaba para igualar el marcador a 1-1.
El tercero de nuevo jugó bien, pero no pudo evitar que en el segundo juego Djokovic le rompiese de nuevo el saque y eso fue todo lo que necesitó el actual campeón del Abierto de Australia y de Wimbledon que lo aseguró para ponerse de nuevo con ventaja después que en el séptimo juego salvó dos pelotas de break con parcial de 15-40.
«Era el objetivo y sabía que cuando estás en los cuartos de un Grand Slam cualquier rival es muy duro», admitió Djokovic. «La clave del triunfo estuvo en el tercer set cuando conseguí el break y luego en el cuarto que puede mantener mi saque para luego hacer los tantos claves».
Djokovic concluyó el partido con 36 golpes ganadores por 17 errores no forzados, comparados a los 36 y 48, respectivamente, de López, que coloco 14 aces y cometió seis dobles faltas, por ninguna de su rival que metió nueve saques directos.
El número uno del mundo logró tres break de ocho oportunidades por una de siete de López, que hizo 24 tantos de 43 subidas a la red por 19 y 33, respectivamente, de Djokovic.