Chelsea no puede en Kiev y sigue complicando su pase
A pesar de las urgencias y la necesidad de acumular méritos y autoestima, el Chelsea se mostró incapaz en Kiev, por donde pasó sin dar sensación de superioridad y sin puntería (0-0).
El cuadro de Jose Mourinho, llamado a ser uno de los aspirantes de la competición, careció de la solidez y la continuidad que se presume a un combatiente de su nivel. Nada que ver con eso. Estuvo inestable el campeón inglés, que al final fue sometido por su adversario. Metido en su área y aceptando un punto a la espera de mejores tiempos.
El futuro del Chelsea sigue tal y como estaba a pesar de dejar pasar una buena ocasión de acumular puntos. El Oporto suma y el cuadro de Mourinho y el Dinamo Kiev quedan abocados a un segundo plano.
Cierto es que el equipo inglés, que solo superó al Maccabi con autoridad pero que perdió con el Oporto, tuvo las ocasiones más claras. Que dos pelotas fueron repelidas por los palos. Pero el Dinamo, desinhibido ya por el cartel de su rival, afrontó un cara a cara al final, cuando emergió definitivamente Andrei Yarmolenko.
Eden Hazard pudo adelantar al Chelsea a los diez minutos pero respondió a la acción el meta, que rozó el balón que al final repelió el palo. Diego Costa, después, no acertó a rematar una falta lateral lanzada por William. Fueron los mejores momentos del Chelsea, que mantenía el dominio.
El cuadro local respondía esporádicamente, como el tiro que se marcó alto de Vitali Buyalski. El Dinamo Kiev se hizo con la posesión mientras el Chelsea aguardaba a la espera de transiciones rápidas.
Tras el descanso, el equipo de Londres recuperó la energía. Llegó entonces la mejor ocasión de los visitantes. Con una falta lanzada desde la media luna que repelió el palo con Buyalski batido.
El Dinamo tuvo la suya en una acción del paraguayo Darlis González que desvió Asmir Begovic. El cuadro ucraniano tuvo la más clara al final, que pudo hundir al Chelsea. Llegó en las botas del Yarmolenko desde la derecha. Su centro, perfecto, no lo llegó a rematar Junior Moraes, que se topó con Begovic.
