Caracasfly llega a Venezuela para invitar a grandes y chicos a vivir una experiencia extrema
En Caracas hay pocos lugares dedicados a la práctica de deportes extremos, sin embargo desde mediados de octubre de 2022, la capital pasó a ser epicentro de grandes emociones. Y es que en el Centro Comercial Cerro Verde se inauguró el túnel de viento de caída libre más grande y potente de Latinoamérica, se trata de Caracasfly.
De la mano del paracaidista profesional, Giancarlo Trimarchi, se concretó y materializó uno de los lugares de mayor esparcimiento en la ciudad, dado que la comunidad dedicada a este deporte ya cuenta en el país con un simulador de caída libre que busca de replicar la experiencia que tienen las personas cuando caen luego de saltar de un paracaídas.
“Tenía desde el año 2005 tratando de materializar este sueño, de construir este túnel y vaya que nos costó trabajo”, rememoró Trimarchi.
Y es que este túnel de viento es el primero en América Latina de este tipo, a pesar de que existen otros en países como Brasil y Argentina, el de Venezuela es el más grande, potente y más moderno de la región.
La idea de concebir y materializar un sueño como este tardó algunos años. Trimarchi recuerda que viviendo en el extranjero solo tenía conocimiento de un par de túneles de este tipo en Estados Unidos y Europa, sin embargo aseguró que desde entonces empezó a trabajar para concretar ese ambicioso proyecto. “No ha sido una tarea nada fácil. Con el tiempo logré dar con las personas correctas que luego me apoyaron para materializar este sueño”, precisó.
¿Quiénes pueden disfrutar de esta experiencia?
Giancarlo Trimarchi asegura que cualquier persona puede realizar este tipo de actividades, sin embargo, el único impedimento que podrían tener es que no hayan sufrido de algún accidente en el hombro.
“Si a una persona en un momento dado se le salió el hombro, lamentablemente no puede disfrutar de esta experiencia. La razón viene dada a que el aire empuja el brazo con tal fuerza que podría dislocar el hombro”, indicó.
Dada su experiencia como paracaidista profesional, Trimarchi quien se inició en este mundo desde el año 1998 y que además formó parte de una de las escuelas donde se formaron los mejores del mundo, tomo la inciativa de abrir un centro de enseñanzas de este deporte en el país. Es allí cuando nace Sky Venezuela en Higuerote en el año 2005.
“Luego de ello fue cuando me surgió la idea del túnel de viento, dado que podíamos contar con un simulador de viento de caída libre sin la necesidad de estar pendiente de las condiciones climáticas y sin la limitante de tener que hacer un curso de paracaidismo para poder saltar. Esto es más sencillo”, refirió.
Confesó además que tuvo que esperar un lapso de cuatro años para poder concretar este gran proyecto, una obra a la que catalogó de “compleja” y que se vio retrasada una vez que inició la pandemia.
“La obra estaba prevista para un tiempo previsto, sin embargo con la crisis sanitaria del coronavirus se retrasó y los costos aumentaron”, destacó.
Innovación en la capital
Siendo una instalación de gran nivel y gran complejidad, muchas piensan que el túnel de viento funciona con unas turbinas ubicadas en la parte inferior del mismo, lo que realmente no es así.
Y es que uno de los instructores de Caracasfly, Alex Hamilton, indicó que el mismo funciona con aire recirculado. “El edifico está lleno de ductos por el que circula el aire y más allá de soplar, el sistema funciona aspirando hacia arriba, que es lo que hace volar a las personas. Las turbinas están apostadas en la parte superior el túnel”, manifestó.
Las personas que estén interesadas en vivir y disfrutar de esta experiencia extrema deberán solicitar su cita con tiempo de antelación a través de la cuenta @Caracasfly gracias a la alta demanda y aceptación que ha tenido.
En lo que a costos se refiere, las personas invertirán 20 dólares por dos minutos de caída libre. “Además de esa experiencia, contarán con equipamiento, braga, casco, lente, tapones de oídos, gorro, una clase de nociones básicas de caída libre e incluso un acompañamiento de un instructor. Todo eso por ese monto”, indicó Hamilton.
Por su parte Trimarchi confesó que apuesta a extender a otras partes de Venezuela y por supuesto a Sudamérica.
“Hemos estado trabajando casi que 23 y hasta 24 horas diarias, gracias a la gran cantidad de gente que nos visitan, no solo de Venezuela, sino también de otros países”, recalcó.
Un vivo ejemplo de ello es Ricardo Zamora, paracaidista mexicano, quien viajó desde Morelia (Michoacán) para cumplir 13 horas de entrenamientos de caída libre en el país.
“Este es el túnel de viento más barato del mundo en la actualidad”, dijo.