Venezuela lidera el Índice de Percepción de Corrupción en América y el Caribe
Venezuela se mantiene dentro de las ocho naciones con el peor Índice de Percepción de la Corrupción (IPC), una clasificación que la Organización No Gubernamental Transparencia Internacional difunde anualmente mediante el capítulo Transparencia Venezuela.
El país fue calificado con la puntuación 17 de 100, que la ubica en el puesto 166 de 176 naciones; Venezuela no subió pero tampoco cayó en las posiciones con respecto al IPC de 2015.
“Nos resulta incómodo la presencia del país en el índice, primero porque siempre salimos mal y segundo porque tenemos un gobierno que es muy sensible a las críticas, y eso hace que no actúe para cambiar esa enfermedad, sino que culpa al termómetro que indica los niveles”, fue una de las conclusiones preliminares de la directora de Transparencia Venezuela, Mercedes de Freitas, al presentar la clasificación en una rueda de prensa.
La nación es percibida como el país más corrupto de América y el Caribe, por detrás de Somalia como el país con la peor clasificación. “La percepción de los venezolanos es que tenemos una altísima corrupción”, destacó De Freitas
El escándalo por la red de sobornos de la empresa brasilera Odebrecht ─que pagó casi $800 millones en sobornos en 12 países, con lo que obtuvo ganancias por $3.340 millones─ impulsó un número importante de investigaciones en países en donde operaba la construirá carioca.
Argentina, Colombia, Ecuador, Panamá y Perú, son solo algunos de los países de la región en donde se han puesto en marcha complejas investigaciones en torno al funcionamiento de la constructora.
En Venezuela, el país en el que la compañía, fuera de Brasil, habría pagado más ─al menos 98 millones de dólares─ el silencio es ensordecedor, por lo que la ONG se ha planteado hacer un llamado urgente para que las autoridades nacionales inicien las investigaciones correspondientes.
“Se le resta importancia al tema de la corrupción al hacer señalamientos nefastos y débiles, como que la clasificación del IPC se trata de una conspiración de la derecha, y no se logran resultados concretos si se quiere luchar contra estas redes poderosas y complejas”, explicó la representante de Transparencia Internacional en el país.
Según la ONG, 69% de los 176 países que conforman la clasificación presentan calificaciones de menos de 50 puntos, lo que denota un carácter masivo y generalizado de la corrupción en el sector público.
Entre 2014 y 2016 Venezuela ha obtenido calificaciones comprendidas de entre 19 y 17 puntos sobre una calificación máxima de 100. “No tenemos esperanzas de que el año que viene tengamos una posición diferentes”, sentenció De Freitas.
El IPC es elaborado en la capital teutona, Berlín, por expertos internacionales anónimos.
Expresiones concretas de la corrupción en Venezuela
Odebrecht mantiene al menos siete proyectos de gran envergadura para el país, lo que se traduce en fuentes de trabajos directas e indirectas, en medio de una situación económica que transita entre la depresión y el colapso macroeconómico, según las evaluaciones de economistas y organismos internacionales.
En la administración del ex presidente Chávez y la de su sucesor, el presidente Nicolás Maduro, la constructora acumuló contratos por 11 mil millones de dólares, según el Registro Nacional de Contratistas (RNC).
Entre los proyectos destacaban: Comuna agro-industrial Diluvio; el Puente Nigale (en el Lago de Maracaibo); la Represa de Tacoma; la Comuna agro-industrial Abreu Lima: el Puente Mercosur (en el Río Orinoco); la Línea 5 del Metro de Caracas y el Tren Guatire-Caracas. Ninguno de estos proyectos ha sido culminado.
Según la información y la sentencia pública difundida por el Departamento de Justicia de EEUU, los contratos de Odebrecht funcionaban con 20% de sobreprecio lo que le permitía a la empresa el uso de coimas.
“Nosotros estamos seguros de que en el caso venezolano los sobrnos superan la cifra de los 98 millones de dólares”, dijo De Freitas al referirse a la cifra preiminar de las operaciones fraudulentas en territorio venezolano registradas desde 2006 a 2015.
La vocera de Transparencia Internacional en el país precisó que recientemente acudió a la Fiscalía, para conminar a la institución a que iniciara una investigación al respecto con urgencia. Las autoridades habrían iniciado una averiguación sin mayores detalles por difundir, según informó De Freitas.
“De Venezuela no hemos recibido nada, en lo que respecta a peticiones de apoyo para la investigación, fue lo que nos informaron autoridades en Brasil”, destacó De Freitas acerca de la colaboración ineludible que debería producirse entre las instituciones venezolanas encargadas de investigar y las redes internacionales que ye se han desarrollado.
Militares y distribución de alimentos
Dos de los elementos referidos como focos dilemáticos en torno a la corrupción en Venezuela son el control militar, creciente en los últimos tres años, y los planes de distribución de alimentos.
“El dilema de la corrupción en Venezuela se traduce en hambre, en la situación terrible de la salud y en inseguridad”, según De Freitas.
El Ejecutivo ha implementado diversas misiones para llevar adelante un proceso de distribución de alimentos, primero con la Misión Alimentación y luego con la Gran Misión Abastecimiento Soberano.
“Las características de los programas socavan los derechos sociales, dados los índices de corrupción. No se trata de lo que podríamos denominar una política pública, sino de un programa de corte social con un enfoque asistencialista”, resaltó la socióloga Desiré González, quien forma parte del equipo de la ONG y se encarga de la evaluación de los programas gubernamentales mediante el Observatorio de Misiones.
En el esquema de corrupción que se desarrolla en los países que conforman el IPC confluyen, pero sobre todo por lo que se presenta en el caso venezolano, confluyen el sector privado, las empresas públicas ─con funcionarios públicos─ y los partidos políticos. “En Venezuela se pueden estar dando todos estos elementos”, concluyó De Freitas