Vecinos quemaron al Judas de cuatro cabezas cerca de Miraflores
A pocas cuadras del Palacio de Miraflores habitantes de Candelaria y del norte de la capital efectuaron una original Quema de Judas usando un muñeco de cuatro cabezas, que personificaba a autoridades del ejecutivo nacional y municipal, se observaron las caras del Presidente Nicolás Maduro, Jorge Rodríguez en su condición de alcalde de Libertador, el parlamentario Diosdado Cabello y Ernesto Villegas jefe de Gobierno del Distrito Capital. Afirmaron que ellos ejemplifican la deplorable gestión gubernamental, asimismo en la actividad se criticó la simbología del diputado paracaidista y su oportunismo.
Carlos Julio Rojas, coordinador del Frente en Defensa del Norte de Caracas, señaló que esta tradición es una manera de como el pueblo protesta y rechaza a los gobernantes que con sus acciones fustiga al pueblo, causando problemas tan graves como la escasez de alimentos, el alto costo de la vida, inseguridad, corrupción galopante y represión brutal que intenta callar la voces disidentes. “Quemamos a Maduro porque lidera un gobierno que tiene a los ciudadanos pasando hambre y haciendo colas eternas mendigando conseguir un poco de leche, carne o papel de baño, Sin dejar de lado los altos índices de inseguridad que matan a más de 60 venezolanos los fines de semana solo en la capital”, aseguró.
Rojas mencionó también al alcalde de Libertador Jorge Rodríguez, quien para el judas del norte de Caracas cumple su sexta nominación consecutiva, ya que su gestión se ha centrado solo en labores politiqueras abandonando su responsabilidad ante lo caraqueños, tomando decisiones equivocadas la cuales tienen a la capital sumergida en el desorden, inseguridad y basura. “En vez de buscar firmas contra el decreto de Obama y estar recorriendo el país debería trabajar para convertir a la ciudad en cuna del turismo histórico y cultural, pero al contrario solo encontramos cientos de invasiones que son focos de violencias, altas cifras de asesinatos y calles repletas de basura. Todo bajo la mirada negligente de un alcalde que para colmo impide al pueblo su derecho a protestar”.