Cicpc detiene a cuatro personas por vender uniformes militares
Rico indicó, que se realizó un operativo en el Cementerio, donde encontraron en poder de los cuatro sujetos "múltiples prendas y 5.000 pares de zapatos de varios tipos, tallas y modelos, los cuales eran fabricados por el Estado venezolano"
El Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc) de Venezuela detuvo a cuatro ciudadanos por la venta ilegal de uniformes militares a bandas criminales que operan en el sector popular conocido como la Cota 905, en Caracas, informó el director del organismo, Douglas Rico.
Rico indicó, en una publicación en su cuenta de Instagram, que la División de Búsqueda y Captura de Organizaciones Criminales realizó el operativo de aprehensión en el sector El Cementerio, en Caracas, donde encontraron en poder de los cuatro sujetos «múltiples prendas y 5.000 pares de zapatos de varios tipos, tallas y modelos, los cuales eran fabricados por el Estado venezolano».
Agregó que este grupo se dedicaba al hurto y comercio de calzado e indumentaria militar, con la finalidad de «lucrarse indebidamente», ya que la venta era destinada a organizaciones delictivas que operan en la Cota 905.
Los detenidos fueron identificados como Juan José Fuentes Lugo, Juan José Fuentes Silva, Leonardo José Castillo Gómez y Narvis de Jesús Aguilar Sáez.
Rico sostuvo que las investigaciones continuarán porque estos uniformes «podrían haber sido destinados a otras personas para ejecutar otras operaciones delictivas en Caracas».
El pasado 9 de febrero, el ministro del Interior de Venezuela, Remigio Ceballos, informó que la Policía abatió a «cinco delincuentes», entre los que se encontraba Carlos Luis Revette, conocido por el alias de «El Koki» y considerado uno de los más buscados del país.
«El Koki» era considerado como uno de los principales responsables de los tiroteos desatados en julio pasado, que paralizaron la vida en el occidente de Caracas durante casi 72 horas.
Tras estos enfrentamientos, en los que murieron al menos cuatro funcionarios policiales, las autoridades desplegaron un operativo para capturar a «Koki», que había construido un bastión en la Cota 905 de la capital y por el que ofrecían una recompensa de 500.000 dólares.