Oposición lamenta que aún no se permita misión de Unasur
La Mesa de la Unidad Democrática (MUD) lamentó lo que calificó de una conducta «errática» del Gobierno venezolano, al que achacó no autorizar, hasta el momento, una misión de observación de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) para las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre.
«Lamentamos que la conducta errática, irregular del Gobierno los haya colocado frente a esta situación de ridículo latinoamericano«, dijo a Efe el secretario ejecutivo de la coalición, Jesús Torrealba en referencia a la autorización que debe dar el ente electoral a la Unasur para participar en los comicios y que no se ha otorgado.
Venezuela había anunciado la observación electoral de la Unasur como la única prevista para estas legislativas, negando así la solicitud del bloque opositor que exigió la participación de la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Unión Europea (EU).
La Corte Electoral Uruguaya (CEU), que preside el Consejo Electoral de Unasur, advirtió el pasado día 30 que «el sentido» de la misión de observación del bloque para esas legislativas «está en riesgo» ante «la proximidad de las elecciones» y la «demora y el agotamiento» de los plazos para la aprobación de la misión.
Adicionalmente, el Tribunal Superior Electoral (TSE) de Brasil anunció el pasado 20 de octubre que declinaba participar en la misión por falta de respuesta de las autoridades de Venezuela sobre las garantías para una «observación objetiva e imparcial».
También, por un supuesto veto impuesto por Venezuela al jurista brasileño Nelson Jobim como líder de la misión, lo que sin embargo no fue confirmado por la Unasur, que más bien negó tal veto.
A juicio de Torrealba, la Unasur, sin embargo, ha marcado «distancias» con el Gobierno de Venezuela.
El jefe de la MUD reiteró que, al margen de lo que ocurra con la misión de Unasur, habrá en diciembre una observación nacional «robusta», así como «una gran cantidad de invitados internacionales» y un sistema «de organización de la ciudadanía».
La MUD se negó hace unos días a firmar un acuerdo presentado por el ente electoral que compromete a todas las fuerzas políticas a aceptar los resultados de diciembre, alegando que no recoge sus propuestas, entre ellas que se ponga coto a lo que denomina «abuso» oficialista en el uso de los medios de comunicación.
La coalición de partidos opositores también ha protestado por el presunto uso de fondos públicos para financiar las campañas de los candidatos oficialistas.
El chavismo ha respondido que la decisión de la oposición de no comprometerse con el texto del ente electoral a aceptar los resultados obedece a un plan para generar caos de no obtener la mayoría del Parlamento, actualmente en manos del oficialismo.
Al respecto, la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena, advirtió ayer en un entrevista de televisión que «un grupúsculo» político nacional está dispuesto «a arrebatar el poder» con armas no democráticas si no obtiene el respaldo en las urnas.
«No podemos generalizar y en eso hay que ser muy responsables; no es un ataque de todo un sector (sino) de un grupúsculo que insiste en irse por caminos equivocados para arrebatar. No están buscando el juego político, sino arrebatar el poder político que no alcancen por la vía democrática, la de los votos«, declaró Lucena.
La funcionaria no especificó si ese sector es parte de las fuerzas afines u opositoras al Gobierno de Maduro.
Sobre los observadores internacionales, Lucena sostuvo que no son estos quienes garantizan la limpieza de los resultados electorales en Venezuela sino las organizaciones política y «aquí los resultados son auditables, son verificables» por técnicos de cada partido, insistió.