«No hubo hecho aislado, lo que hubo fue un asesinato»
La alcaldesa de San Cristóbal, Patricia De Ceballos, condenó este miércoles el asesinato del joven de 14 años, Kluiverth Roa, asesinado este martes 24 de febrero tras recibir un disparo en la cabeza de un policía nacional bolivariano. Asimismo, De Ceballos condenó el decreto 006810, que ordena el uso de armas de fuego en manifestaciones pacíficas.
“No hubo un hecho aislado, lo que hubo fue un asesinato. Les hablo no como alcaldesa, sino como madre tachirense, que me solidarizo con las miles de familias que pierden a sus hijos cada día en el país. El asesinato de Kluiberth Roa se suma a los miles de caídos por armas del Gobierno”.
Exigió justicia para las familias venezolanas que han perdido a sus seres queridos, al mismo tiempo que instó a todos los ciudadanos alzar la voz para que este hecho no se repita. “Respeto ante el dolor de la familia venezolana que no recibe justicia, pues se nos pretende hacer ver que se hace justicia simplemente porque se detiene a un Policía Nacional Bolivariano, que es también joven y moralmente muere. Tenemos que luchar más que nunca para que esto no pase de nuevo”. “No debe ocurrir ni una muerte más en Venezuela. Mucho menos en manos del gobierno que, por ley, debe garantizar la vida de todos los ciudadanos”.
La máxima autoridad de San Cristóbal estimó que con la resolución 00861, “han legalizado la pena de muerte en Venezuela. Una muerte, que se les aplica a los jóvenes, a los estudiantes y a todos los que piensan distinto y luchan por un mejor país. A quienes tratan de minimizar hechos tan graves, no se laven las manos con condolencias hipócritas. Existe un vínculo directo entre estos lamentables hechos y la aplicación de medidas que ya acumulan dos situaciones de abaleados durante manifestaciones en Táchira”.
Recordó que la entidad aún no se recupera del tiroteo de los que fueron víctimas tres estudiantes en los alrededores de la Universidad Católica (UCAT). “Lo que derivó en la destitución del jefe policial, cuando ocurre este nuevo trágico hecho. El asesinato del liceísta Kluiberth Roa, de sólo 14 años de edad, es consecuencia de una resolución que viola derechos universales como la vida. ¿Qué clase de peligro representaba el niño con su morral? ¿Qué riesgo era Kluiberth para fuerzas policiales que accionaron a mansalva contra él quitándole la vida? Como madre hago un llamado a seguir luchando, sin miedo, en paz, por la vida de nuestros hijos y por los derechos de todos los venezolanos”.
