La protesta pacífica, la madurez ciudadana impidió un segundo 11A
El 1ero de septiembre se convirtió en una referencia pacífica para Venezuela, a pesar de que durante las últimas dos semanas se escucharon rumores que anunciaban la «Toma de Caracas» como un segundo 11 de abril, no fue así. La provocación por un grupo de sujetos que incitaban a la violencia no pudo con la firmeza de quienes apostaron por una protesta pacífica.
La convocatoria realizada por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), superó los objetivos y las expectativas de los venezolanos aunque un grupo de personas asistentes a la marcha insistieron en que los hechos trascendieran más.
Jesús «Chúo» Torrealba, secretario ejecutivo de la MUD, expresó que el 1ero de septiembre fue «un día muy especial que sirve para hacer un balance importante sobre logros construidos a pulso».
Además aseguró «es válida la ansiedad, la angustia, la preocupación y la impaciencia» de los venezolanos porque Maduro deje de ser el Presidente, pero explicó “para que esto suceda debe existir organización y pensar con cabeza fría para las estrategias”.
En comparación con las llamadas guarimbas del 2014 y las protestas anteriores a la “Toma de Caracas”, las cuales no pasaron más allá de Bello Monte o la avenida Libertador. Este jueves 1ero de septiembre la MUD y la mayoría de los ciudadanos demostraron que la madurez llegó a la política y a las protestas del pueblo venezolano.
Mientras un pequeño grupo que muchos han calificado de infiltrados, insistían en la violencia como medida en contra de un Gobierno que aseguran no ha resuelto sus problemas, los ciudadanos que salieron exigiendo una salida democrática se mantuvieron en su posición hasta el final, cada uno regresando a sus hogares o tomándose la tarde para compartir entre familia y amigos.
Cuando nos acercamos a las personas, nos expresaron que el referendo revocatorio es la salida a la que apuestan porque están cansados de que a diario la delincuencia derrame la sangre para ellos también hacerla.
Torrealba afirmó que con la actuación de los asistentes a la marcha quedó demostrado que la MUD tiene una estructura política organizada con una conexión permanente con los movimientos sociales, organizaciones no gubernamentales y sindicatos.
En el momento que iniciaron los disturbios muchos se apartaron y rápidamente se dispersaron sin involucrarse en el conflicto. Algunos ciudadanos participaron con sus hijos y otros llevaron a los abuelos, porque a diferencia de quienes llevaron a la marcha un ideal de “golpe de Estado, desobediencia civil y confrontación violenta en contra de los efectivos de seguridad” no cumplieron con su objetivo.
La presión pacífica y la salida constitucional fue la expresión que reinó en los miles de venezolanos que asistieron a la “Toma de Caracas”.
«El objetivo era mostrar al país y al mundo el tamaño inmenso de la Venezuela que quiere cambio. Y uno se pregunta: ¿Después de la marcha qué? esto está claro, después de la marcha sigue la lucha, siguen las actividades» concluyó Torrealba.
Asimismo, Ocariz rechazó los hechos irregulares que se presentaron una vez culminada la protesta por un grupo de aproximadamente 40 personas. Señaló que estos solo le hacen daño a la oposición y destacando que la movilización «fue apoteósica. Una organización impecable de días. No queremos guarimbas, queremos elecciones. Esta concentración fue una de las más grandes del continente».
EN DIRECTO en #Periscope: .@CarlosOcariz declara sobre #TomaDeCaracas https://t.co/uUcoF5X1hz
— Analítica (@Analitica) September 2, 2016