Informe «Mujeres al límite» deja en evidencia vulneración de los derechos humanos
La emergencia humanitaria compleja que atraviesa Venezuela ha dejado en evidencia la vulnerabilidad y violación de los derechos humanos de mujeres, niñas y adolescentes.
Así lo denunció en su informe “Mujeres al límite” la coalición Equivalencias en Acción, conformada por las ONG´s Avesa, Cepaz, Freya y Mujeres en Línea, las cuales exigen que se permita el acceso de la ayuda humanitaria al país para poder garantizar el acceso a la vida.
Según la investigación hay un grave retroceso en el disfrute en lo que se refiere a la salud sexual y reproductiva que queda en evidencia por la escasez de métodos anticonceptivos, la falta de insumos y de profesionales en el área.
El aumento de la mortalidad materna, el embarazo precoz, las infecciones de transmisión sexual y los abortos provocados que se asocian a embarazos no deseados son sólo algunas de las consecuencias de la ausencia de políticas públicas.
Esta investigación se realizó en cuatro instituciones hospitalarias, e indica que por cada cuatro partos hubo un aborto durante el período agosto-diciembre de 2018. Se registraron en total de 2.246 abortos, lo que representa 15 abortos diarios en promedio y la mayoría son por falta de planificación.
Además, para 2018 Cáritas de Venezuela señaló que 21% de las mujeres embarazadas presentaban desnutrición aguda como consecuencia de las dificultades que viven los ciudadanos actualmente para tener acceso a los alimentos. Situación que se repite en los centros de salud que prestan este servicio y que hoy en día sólo pueden cubrir una parte de las comidas de los pacientes.
Cuidarse a la hora de tener una relación sexual es otra de las dificultades que presentan las mujeres y es que el informe señala que 90% de los métodos anticonceptivos están desaparecidos de los anaqueles y los que están disponible tienen precios que resultan muy altos para quienes ganan salario mínimo.
Otro punto a tratar es que la diaspora también se ha visto afectada. El 76,7% de las mujeres en proceso de gestación que ha llegado a Colombia no ha contado con el debido control prenatal que necesitan para tener un bebé saludable. En el caso de Brasil, específicamente en Roraima, 10% de los partos es de venezolanas.
Retroceso
Mientras en otros países del mundo, el feminismo y el empoderamiento de la mujer siguen abriéndose paso, en Venezuela pasa lo contrario. La investigación indica que en el país hay una tendencia, que sigue en ascenso, a que las mujeres se dediquen por completo a las labores del hogar y a la crianza de los niños porque hay una división sexual que excluye y expulsa a las mujeres del mercado laboral.
Según datos del INE, para 2016 había 3.071.881 de mujeres dedicadas exclusivamente al hogar contra sólo 64.000 hombres. Para las mujeres, esta responsabilidad por los cuidados ha disminuido sus oportunidades de ingresar al mantenerse trabajando y de lograr autonomía económica debido a la crisis.
La violencia contra la mujer sigue estando en auge, aunque no hay cifras oficiales, se pudo conocer que sólo para 2018 se registraron 448 femicidios en mujeres entre los 25 y los 45 años. Un aumento con respecto a lo que fue el 2017.
Explotación a indígenas
Si en las ciudades la situación es precaria, la misma empeora cuando se trata de las comunidades indígenas en las que niñas y adolescentes son explotadas sexualmente y además tratadas como esclavas e inclusive en algunos casos trasladadas a otros países.
Según datos de la Organización de Mujeres Amazónicas, Wanaaleru, citada por el informe “Mujeres al Límite 2019”, la violencia hacia esta población por motivos asociados a la actividad minera ha causado un aumento en los índices de femicidios y violencia territorial.
