En su aniversario 64° la UCAB llama a defender Venezuela con convicción
La historia de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) comenzó a escribirse el 24 de octubre de 1953, cuando abrió sus puertas en un edificio de seis pisos ubicado en la esquina de Jesuitas, en el centro de Caracas, y recibió a 311 jóvenes inscritos para estudiar Derecho, Ingeniería o hacer un curso de formación preuniversitaria.
64 años después, la UCAB se ha consolidado como una de las principales casas de estudio superior de Venezuela. Con tres sedes en funcionamiento (Caracas, Guayana y Los Teques) ofrece 14 carreras de pregrado y decenas de programas de especialización, maestría y doctorados; además, adelanta una intensa labor de investigación en diversas áreas, desarrolla una intensa obra de extensión social a favor de los sectores más necesitados; y ya ha formado a más de 70.000 profesionales.
“La UCAB es la historia de sus muchos docentes que han marcado la vida de nuestros estudiantes con la enseñanza y ejemplos brindados -resume el rector, Francisco José Virtuoso. La UCAB son los jesuitas que han dado su vida en ella y es el trabajo de muchos laicos cooperadores con ellos. Es ella principalmente el bullicio y el entusiasmo de los muchos estudiantes que pasan por sus aulas y que nos estimulan continuamente con sus inquietudes. La UCAB es el rostro de sus empleados que con su trabajo auxiliar hacen posible que esta institución funcione con excelencia, prontitud y eficiencia”.
La celebración de los 64 años coincide con la publicación de QS Latin American University Ranking 2018, lista de las principales universidades de América Latina en la que la UCAB se ubicó en el puesto 65 y se consolidó como la mejor universidad privada de Venezuela y la tercera del país.
Para el rector, estos resultados dan un motivo adicional para festejar porque revalidan la calidad y excelencia de esta casa de estudios y suponen más compromiso y trabajo. “LA UCAB le ofrece al país seguir siendo una universidad de calidad y excelencia, reconocida nacional e internacionalmente. En este sentido, celebramos nuestra posición en el ranking QS que nos coloca en el puesto 65 de las mejores universidades de América Latina. De esta manera, podemos servir mejor al país, formando profesionales con vocación de excelencia, produciendo conocimiento, ofreciendo alternativas a los problemas del país”.
Crisis en el sector educativo
El aniversario también llega en medio de la grave crisis del sector educativo y las amenazas a la autonomía universitaria. Recientemente, cinco universidades, incluyendo la UCAB, presentaron el informe “El pensamiento bajo amenaza”, cuya conclusión principal advierte que en el Estado Venezolano hay “un manejo deliberado de normas, políticas y prácticas para suprimir la libertad académica y la autonomía universitaria”.
Ante este diagnóstico, Virtuoso dejó claro que la UCAB estará firme en la defensa de la institucionalidad.
“La universidad moderna tiene una función política insoslayable. Entendemos aquí por función política aquella finalidad de la universidad dirigida a incidir en el diseño y promoción de los objetivos rectores de la sociedad, así como también en la formación de las capacidades humanas necesarias para gestionarlos. Nuestro gran reto es robustecer la universidad construyendo al mismo tiempo país que soñamos. En esa tarea, todos tenemos un aporte decisivo que brindar. La universidad y el país nos necesitan. Hoy más que nunca tenemos que dejarnos guiar por una racionalidad constructora de posibilidades. Aquí hay Venezuela para rato, porque hay mucha energía joven, entusiasmo, buena voluntad y conocimiento”.
El sacerdote jesuita llamó a docentes, empleados y estudiantes ucabistas a esforzarse cada día para seguir haciendo posible la misión que sirve de norte a la UCAB: contribuir con la formación educativa de la juventud y promover el desarrollo nacional.
“Los que no nos conformamos con la situación vigente tratamos de sobreponernos a los impactos negativos de nuestras experiencias y cultivamos una actitud reflexiva ante lo que percibimos, nos abrimos al diálogo, analizamos posibilidades y tratamos de buscar rutas de acción que nos permitan transformar lo que existe. Como rector invito a la comunidad ucabista a fortalecer fe y esperanza, a optar por este país con entusiasmo y convicción, a luchar por Venezuela, a estar muy unidos para defender la autonomía y los derechos de su comunidad”.
También apeló al espíritu ciudadano de todos los venezolanos, les pidió no dejarse vencer por los obstáculos y trabajar para emprender la recuperación nacional. “Venezuela tiene el reto de fortalecer su esperanza para activarse en la reconstrucción de la República y de la institucionalidad del voto como mecanismo fundamental para decidir sus cambios políticos. Tiene también el reto de una ciudadanía que exige con dignidad sus derechos fundamentales para garantizar calidad de vida, progreso e inclusión”.