Contrabando y falsificación de cigarrillos incrementó un 300% con respecto a 2018
Cerca de 1 billón 700 mil millones de cigarros ilícitos de 67 marcas que se encuentran en el mercado nacional lograron penetrar en el consumo de los venezolanos a través del contrabando y la falsificación de los mismos, lo que representó un aumento del 300% durante el primer semestre de 2019 en comparación con el año 2018, denunció la Cigarrera Bigott.
En este sentido, la compañía de cigarrillos alertó a la opinión pública y a las autoridades competentes que estos productos no cumplen con la permisología legal implementada por el Ministerio para la Salud y por el Servicio Nacional Integrado de Administración Aduanera y Tributaria (Seniat), por lo que son cigarros que se producen y comercializan bajo una marca que, aunque podría estar registrada, no cuenta con las autorizaciones para operar.
“Es producido con materiales de baja calidad, su empaque no cuenta con las advertencias exigidas y su venta no está autorizada por el Ministerio de Salud, ni por la autoridad en materia de impuestos, los cuales no cancela al fisco”, explicó Daniella Álvarez, directora de asuntos corporativos de Cigarrera Bigott.
Como consecuencia de esta problemática, Biggott indicó que para el Estado venezolano el comercio ilícito de cigarrillos es un «gran adversario», y como muestra de ello, la emrpesa reflejó que 25% de lo registrado en el primer semestre representa para el Fisco Nacional una pérdida estimada de 965 millardos 600 mil millones de bolívares, que equivalen a 24 mil 140 millones de salarios mínimos, aproximadamente.
Otra de las características de este comercio ilegal es que la mayoría de las veces el producto se produce en fábricas que no son legales y, normalmente, es contrabandeado de un país a otro.
“Los estudios señalan que 36% de los cigarrillos ilegales presentes en Venezuela son elaborados en Paraguay, 32% en Colombia y el restante en Uruguay, China, Corea del Sur, India, Emiratos Árabes y en países de la Unión Europea”, detalló Álvarez.
Las investigaciones también señalaron que 80% de cigarrillos de contrabando ingresa a Venezuela por las zonas fronterizas con Colombia y el restante a través de Aruba, Curazao y la frontera con Brasil. Las principales áreas o zonas de ingreso del contrabando de cigarrillos a Venezuela son los Estados Bolívar, Falcón, Táchira y Zulia.
La Cigarrera Bigott consideró que el comercio ilícito de cigarrillos es un grave problema que potencia los riesgos de la salud de los consumidores y afecta las finanzas del país.
“Abordamos y tratamos el tema de manera abierta y proactiva, tanto con representantes gubernamentales y reguladores como con actores de las cadenas de comercialización y el consumidor final. El asunto requiere una respuesta fuerte: industria, gobierno e instituciones de orden público trabajando juntos y con efectividad”, recalcó Álvarez.