Con cierre de avenida vecinos de La Esperanza protestan por falta de agua
Marighzell Lucena – Vargas.-
@mlucena15
Al menos 10 años sin saber lo que es recibir agua por tubería llevan las familias de los sectores de La Esperanza I, II, III y IV, en la parroquia Carayaca al oeste del estado Vargas, quienes cansados de las promesas gubernamentales protestaron este lunes con el cierre de la avenida principal por la falta del vital líquido. Por espacio de una hora los vecinos impidieron el paso vehicular entre el tramo de Arrecife y Paraíso Azul, en reclamo a la falta de suministro gratuito de cisternas.
Alegaron que en la última visita del Gobernador, Jorge Luis García Carneiro, dos días antes de las elecciones que lo llevaron a la reelección, el mandatario prometió “que en 15 días la comunidad tendría agua, transporte y aseo”, y hasta la fecha nada se ha cumplido. Rosa Martínez, advierte que además de rendir los pocos ingresos del hogar entre la comida y el transporte, también gastar para comprar agua. “Un tobo o pimpina de agua la venden en 60 mil bolívares, algunos se aprovechan pero quienes necesitamos y no contamos con recursos para una cisterna no tenemos más alternativa”, dijo, advirtiendo que lleva días sin enviar a sus hijos a la escuela porque no ha podido lavar los uniformes escolares.
Alfredo Estévez, habitante de La Esperanza II, refiere que una cisterna de 10 mil litros tiene un costo de 3 millones de bolívares; y que no todas las familias pueden cubrir esos gastos. “Tenemos dos años sin recibir el servicio de cisterna gratuito que enviaba el gobierno y ahora estamos obligados a pagarla los que podemos. Son al menos 17 sectores afectados que reclaman respuesta al ejecutivo regional y municipal. Las cisternas dejaron de subir porque comenzaron a dañarse y entre la falta de repuestos y los altos costos, simplemente se olvidaron de mantener el servicio”, explica.
Señalan los afectados que ante la falta de agua los niveles de insalubridad y la propagación de infecciones y enfermedades prevalecen en las comunidades, sumado a las deficiencias en el servicio de recolección de desechos sólidos y el transporte. “En La Esperanza no tenemos calidad de vida, los servicios públicos colapsados y estamos olvidados por las autoridades. No contamos con el agua que es lo más vital y ya las familias no pueden seguir aguantando tanta desidia”, sostuvo.
Las comunidades de La Esperanza amenazan con volver nuevamente a las calles las veces que sea necesario para elevar su voz de protesta y reclamar el cumplimiento de las promesas gubernamentales. Exigen que el servicio de cisternas gratuita sea retomado.
