Colegio de Arquitectos de Venezuela rechaza la Constituyente
El Colegio de Arquitectos de Venezuela, en reunión conjunta de su Junta Directiva Nacional, representantes de la Mesa Directiva de la Asamblea, representantes de filiales estatales y regionales y colegas miembros titulares, realizada el Día Nacional del Arquitecto, martes 4 de Julio de 2017 y en ocasión de la conmemoración de su cincuenta aniversario, une sus voces en la siguiente declaratoria gremial en los siguientes términos:
CONSIDERANDO
Que conforme al Acta Constitutiva de nuestro Colegio, en el cumplimiento de sus competencias y valores fundamentales, “dar impulso al estudio y desarrollo de la arquitectura, cultivar la ética de la profesión del arquitecto, establecer vínculos de unión entre sus miembros y propender a la defensa y mejoramiento de la profesión; fomentar el perfeccionamiento de la arquitectura y agrupar todas las fuerzas activas profesionales, para crear en el país la conciencia técnica, artística y social del valor de la carrera del arquitecto.”, se nos impone ser garantes del interés público y procurar el bienestar social.
CONSIDERANDO
Que la lamentable situación que atraviesa nuestro país exige a nuestro gremio no ser ajeno a la realidad que vivimos, expresada en una anomia social y política con devastadoras consecuencias sobre una ciudadanía y sus derechos humanos que sufre carencias de todo orden, crisis alimentaria y de salud, represión desproporcionada, inflación desmesurada, inseguridad, impunidad, destrucción del tejido social, ruina de las ciudades y pueblos, de la infraestructura vial, portuaria, ferroviaria y aeroportuaria, eléctrica y demás servicios públicos, destrucción del aparato productivo, entre otras carencias y dificultades que hacen insostenible el funcionamiento normal del país e imposible la vida en libertad por la violación sistemática de los derechos humanos , para cuya solución no hace falta la elección de una Asamblea Nacional Constituyente Comunal.
CONSIDERANDO
Que sistemáticamente quienes tienen a cargo el orden público han atacado a nuestros jóvenes, estudiantes o no, que han asumido con heroico desempeño la defensa de la democracia en atención a su legítimo derecho a la protesta pacífica, siendo asesinados, detenidos, torturados y/o víctimas de violaciones de los derechos humanos más elementales.
CONSIDERANDO
Que a los venezolanos se nos ha conculcado el derecho al voto al prescindir del necesario cuestionamiento sobre la voluntad de que proceda o no mediante consulta, la elección de una Asamblea Nacional Constituyente Comunal, considerada ilegítima, inconstitucional e innecesaria por numerosas instituciones, tales como la Academia de la Ingeniería y el Hábitat y el Colegio de Ingenieros, Arquitectos y Profesionales Afines, y que además, se nos ha impedido acudir a elecciones de autoridades ya vencidas en su ejercicio.
CONSIDERANDO
Que es obligación de todos los Arquitectos alzar y unir nuestras voces en contra de los atropellos institucionales e inconstitucionales, denunciados hasta por la Fiscal General de la República, obligación esta que nuestro gremio, históricamente, nunca ha eludido.
CONSIDERANDO
Que la Arquitectura, como actividad creativa y de servicio a la sociedad, requiere de espacio para desarrollarse y así beneficiar el entorno donde se desenvuelve. De allí la necesidad de reclamar el respeto fundamental a las garantías que todo ser humano necesita para poder ejercer las tareas que nos son propias.
ACORDAMOS
1.- Invitar a los Arquitectos a apoyar el acuerdo aprobado por la Asamblea Nacional en su sesión del 20 de junio del 2017 mediante el cual invocan los artículos 333 y 350 de la Constitución Nacional de la República Bolivariana de Venezuela.
2.- Incorporarnos a las acciones cívicas y pacíficas en defensa de la Constitución Nacional vigente y la democracia venezolana, y en contra de la elección de una Asamblea Nacional Constituyente Comunal inconstitucional, ilegítima e innecesaria.
3. Sumarnos a la iniciativa unitaria de promover un acuerdo nacional para un cambio por vía electoral, de manera pacífica y democrática por un gobierno de unidad nacional que restablezca la democracia y la noción de República lo antes posible.
4. Demandar la relegitimación y actualización de los poderes, entre ellos el poder electoral y el Tribunal Supremo de Justicia antes de cualquier elección, para con ello demostrar la verdadera voluntad del pueblo venezolano que aspira a gobernantes virtuosos, honestos, idóneos, competentes, eficientes, que orienten sus esfuerzos a procurar una Venezuela verdaderamente democrática.
5. Exigir a la Fuerza Armada Nacional que asuman su rol como garantes de la Constitución Nacional, defensores de la soberanía y la integridad del territorio, apegados a la Ley y en ningún caso, utilizar recursos y armas de la Republica en contra de los ciudadanos en violación de sus derechos humanos.
6. Apoyar a asociaciones e instituciones probas que velan y luchan por los derechos humanos, a hacernos parte activo de su accionar y apuntalar su labor en beneficio de nuestra nación.
7. Sumarnos y constituir un gran esfuerzo transdisciplinario para el reordenamiento del territorio, la transformación del modelo de gestión urbana y ambiental, el rescate del espacio público, la dignificación de la arquitectura pública, la intervención de los barrios para alcanzar estándares urbanos de calidad, sostenibles y, en general, hacer del territorio y por tanto del país, un lugar de civismo, democracia y libertad plena para nuestra ciudadanía.
Dado, firmado y sellado en Caracas a los cuatro (4) días del mes de julio del año dos mil diez y siete.