Al oeste de Maracaibo no llegan las bolsas de comida
Teresa Luengo/Zulia
@teresitaluengo
Habitantes del oeste de la capital zuliana y de San Francisco denunciaron irregularidades en la distribución y venta de bolsas de comida a través de los CLAP, además de la grave crisis que hay por la severa escasez de alimentos y ante las colas kilométricas que persisten en los supermercados.
Los dirigentes vecinales José Matos, Reina Marcano y Lucila Paniagua, refieren que en comunidades de Francisco Eugenio Bustamante, Cristo de Aranza y Cacique Mara a pesar de que han censado a varias familias, las pocas bolsas que llegan solo se distribuyen entre los afectos al oficialismo. En San Francisco solo pueden censarse los que pertenecen a consejos comunales o el PSUV. Las colas en establecimientos privados o público se han incrementado considerablemente pese a los controles que hay en la frontera y en algunos supermercados, y con ello también aumentaron las riñas y delitos por las alteraciones del orden público.
En varios planteles públicos y de zonas rurales ya los maestros reportan que hay un fuerte ausentismo escolar, debido a que han cerrado la mayoría de los comedores y otros no pueden dar las comidas balanceadas a los muchachos. En escuelas de Baralt y Cabimas hay alumnos que no tienen ni siquiera para comer en sus casas y otros cuyas madres han manifestado que no tienen como preparar sus loncheras ante lo inaccesible que está comprar meriendas y otros, como carnes, pollos, quesos, huevos, harina pan y demás.
Desde mayo, Rafael Viloria, dirigente de Primero Justicia Zulia, denunció la paralización del Programa de Alimentación Escolar en la región por la escasez. Denunció que se ha agudizado la crisis alimentaria, laboral y de infraestructura en instituciones educativas dependientes del gobierno regional.
Viloria expresó que ante la crisis que vive el país “muchos de los niños contaban con el alimento que percibían en las escuelas, pero hoy gracias a la desidia del gobernador del Zulia llegan a los colegios a seguir pasando hambre”.
“Cada niño debe consumir al menos 2 mil calorías diarias, pero lamentablemente la alimentación que ofrecen en las escuelas regionales no llega ni a 250 calorías, afectando su desarrollo, crecimiento y rendimiento académico por la mala atención que están percibiendo”.
Pese a esta situación, el gobernador Francisco Arias Cardenas informó que se han conformado más de 900 comités en la región y el pasado fin de semana distribuyeron más de 40 toneladas de alimentos entre 7 mil familias de los municipios Cabimas, Almirante Padilla, Jesús María Semprun y Sucre.