Violencia interétnica cobró la vida de 40 civiles en Mali
Cuarenta civiles murieron hoy en un poblado del centro de Mali en un ataque tras un asalto que la policía atribuyó a milicias «donzo», formadas por cazadores tradicionales de etnia bambara enfrentados a los pastores de etnia peul.
Se supo que otros cuatro civiles resultaron heridos en este ataque y más de 60 casas y decenas de almacenes de comida en hogares fueron quemados.
Una fuente de seguridad informó que los hombres armados invadieron en la madrugada la población Libbé, en la comarca de Bankass, en la región de Mopti, y atacaron a la población local de mayoría peul.
El líder de la etnia peul, quien no quiso identificarse, aseguró a través de una llamada telefónica aseguró que luego de esta masacre la única manera que hay para poner fin a estos actos de violencia, es el diálogo interétnico, la reconciliación entre los diferentes grupos y la disolución de las milicias locales.
El mismo señaló que: «el diálogo tiene que tener lugar en los pueblos de Mopti y no en las oficinas de la capital Bamako».
Más de 30 civiles, entre ellos niños y ancianos, murieron en un ataque similar perpetrado contra los habitantes peul de la población de Koumaga, situada a siete kilómetros de Libbé, el hecho ocurrió en el mes de enero.
El control de la tierra y las religiosas han sido motivo de que la región de Mopti en el 2018, se ubicara como un escenario de choques intermitentes entre los grupos tuareg rivales o entre los cazadores y los pastores por ya que los cazadores acusan a los peul de tener vínculos con los grupos yihadistas locales.
Por su parte, la ONG Human Rights Watch alertó que durante 2018 más de 200 civiles murieron y decenas de aldeas fueron incendiadas en el centro de Mali como consecuencia de ataques de milicias formadas por etnias de la zona.