Unicef denuncia que combates en Ucrania dejan miles de niños sin agua ni calefacción
El recrudecimiento de los combates entre el Ejército ucraniano y las milicias prorrusas en el este del país, han dejado más de 17.000 personas, de las que 2.500 son niños, sin agua, calefacción o electricidad en la localidad de Avdéyevka, denunció este miércoles el Fondo de la ONU para la Infancia (Unicef).
Los enfrentamientos del 29 y el 30 de enero dañaron las redes de suministro eléctrico y de abastecimiento de agua de la ciudad de la la región de Donestk, y provocaron interrupciones en el servicio energético.
Como consecuencia, se desactivó la instalación en la que se basa el sistema de calefacción de Avdéyevka.
Unicef advirtió en un comunicado de que «la situación podría tener consecuencias catastróficas para los residentes» de la localidad, donde se han registrado temperaturas de hasta 17 grados bajo cero.
Asimismo, Unicef también denunció que el abastecimiento de agua a otras ciudades y aldeas de la región se ha detenido después de que se cortara el suministro de energía una planta de filtración que proporciona agua a aproximadamente 400.000 personas en Donestk.
Por ello, este bien de primera necesidad está ahora «racionado» y que existe la posibilidad de que el suministro de agua se detenga por completo, remarcó Unicef.
Ante la falta de agua y electricidad, el frío entrará en los hogares en los que «las condiciones de salud se deterioran» cada vez más», dijo la representante de la organización en Ucrania, Giovanna Barberis.
Además, Unicef denunció que seis escuelas y cuatro guarderías han cerrado en la zona como consecuencia de los combates.
La interrupción de la educación de los más pequeños provoca que estos pierdan su rutina «tan necesaria» y la estabilidad de ir a la escuela, recordó la organización humanitaria.
Ante la gravedad de la situación en el este de Ucrania, el Consejo de Seguridad de la ONU hizo anoche un llamamiento al restablecimiento inmediato del alto el fuego.
Según datos de la ONU, en los casi tres años de conflicto entre militares ucranianos y milicias separatistas prorrusas, en las regiones orientales ucranianas han muerto en torno a 10.000 personas, entre combatientes y civiles.