Tribunal Supremo de EE.UU. anula la protección del derecho al aborto
El Tribunal Supremo de Estados Unidos anuló la protección del derecho al aborto, la cual está vigente en el país desde 1973. La decisión permitirá a cada estado decidir si mantiene o prohíbe el derecho reproductivo.
El fallo, redactado por el juez Samuel Alito, se sustenta en que la Constitución «no otorga» dicho derecho y devuelve la autoridad para poder legislar sobre el aborto al «pueblo» y sus «representantes electos de los ciudadanos».
La medida revoca la sentencia «Roe vs. Wade», aprobada hace 49 años y que protegía el derecho al aborto en todo el país. De igual forma, elimina la resolución de 1992, «Planned Parenthood versus Casey», que reafirmaba que permitía a los estados establecer regulaciones sobre el proceso de aborto.
Proceso de votación
Con seis votos a favor y tres en contra, el Supremo aprobó la decisión. Sin embargo, el juez John Roberts, presidente de la Corte Suprema, mantuvo una opinión separada, pues está de acuerdo con la sentencia concreta pero no con la revocación de los precedentes asentados en «Roe» y «Casey».
«La decisión del Tribunal de revocar «Roe» y «Casey» es una fuerte sacudida al sistema legal, independientemente de cómo vean ustedes esos casos», explicó Roberts, y aseguró que tiene «dudas» sobre que se deba tratar de la misma manera la prohibición de cualquier aborto y una prohibición del aborto a partir de las 15 semanas de embarazo.
Roberts puede disentir de la revocación de «Roe» porque la decisión del Supremo se refiere a un caso concreto, «Dobbs versus Jackson Women’s Health Organization», sobre si el estado de Mississippi tenía derecho a prohibir cualquier aborto a partir de las 15 semanas, como hizo en 2018.
Los jueces que han votado a favor de revocar «Roe vs Wade» insisten en no considerar el aborto un derecho constitucional ni tampoco un derecho apoyado por la «historia o la tradición» estadounidense.
Además consideran que este precedente legal es «ofensivamente incorrecto» y «chocaba» con la propia Constitución. Y añade que el otro fallo que ratificaba el derecho al aborto, «Planned Parenthood vs Casey», en 1992, «perpetuaba» esos errores.
Reacciones
Tras conocerse la noticia, el presidente Joe Biden calificó este 24 de junio como un “un día triste” para el Tribunal Supremo y para el país; y responsabilizó a los tres jueces conservadores del Tribunal Supremo, nominados por Donald Trump, de las implicaciones que este fallo generará en el país.
«Tres jueces nombrados por un presidente, Donald Trump, están en el centro de esta decisión de acabar con la balanza de la justicia y eliminar un derecho fundamental de las mujeres en este país», aseguró durante en referencia a los magistrados Neil M. Gorsuch, Brett M. Kavanaugh y Amy Coney Barrett.
Por su parte, Stephen Breyer, Sonia Sotomayor y Elena Kagan, los tres jueces progresistas del Supremo manifestaron su decepción ante el evento.
“Con pena para este tribunal, pero sobre todo para los millones de mujeres estadounidenses que han perdido hoy un derecho fundamentalmente constitucional, disentimos”.
Ken Paxton, fiscal general de Texas, aseguró que el Supremo acabó “con la era más corrupta legal y moralmente en la historia de Estados Unidos”, y declaró el aborto «ilegal» en el estado. Asimismo, notificó que esta fecha es festiva. “Alabado sea el Señor, el aborto es ahora ilegal en Texas. Y hoy cierro mi oficina y declaro fiesta anual en memoria de los 70 millones de vidas perdidas por culpa del aborto”.
El Vaticano también hizo pública su posición tras la decisión. «El dictamen del Tribunal muestra cómo la cuestión del aborto sigue suscitando un acalorado debate. El hecho de que un gran país con una larga tradición democrática haya cambiado su posición sobre esta cuestión también interpela al mundo entero. (…) La protección y defensa de la vida humana no es una cuestión que pueda quedar confinada al ejercicio de los derechos individuales, sino que es un asunto de amplio calado social», reza un comunicado de la Pontificia Academia para la Vida, quien destacó que es necesario “asegurar una educación sexual adecuada, garantizar una asistencia sanitaria accesible a todos y preparar medidas legislativas para proteger la familia y la maternidad, superando las desigualdades existentes».
El presidente francés, Emmanuel Macron, envió un mensaje de solidaridad a las mujeres estadounidenses. «El aborto es un derecho fundamental para todas las mujeres. Hay que protegerlo. Manifiesto mi solidaridad con las mujeres cuyas libertades son cuestionadas hoy por el Tribunal Supremo de los Estados Unidos de América», escribió en Twitter.
*Con información de Efe