Elecciones: Independentistas logran mayoría en Cataluña
Los partidos independentistas lograron el domingo la mayoría absoluta del Parlamento catalán en unas elecciones autonómicas convocadas como plebiscito sobre la independencia de Cataluña, según resultados oficiales con el 70 por ciento escrutado.
La plataforma soberanista Junts pel Sí sumó un 39,33 por ciento de los sufragios, lo que se traduciría en 62 escaños de una cámara regional de 135 diputados, según estos datos.
Pese a que JPS no obtendría con estos datos la mayoría absoluta en solitario, el anunciado apoyo de los 10 escaños de los independentistas de la Candidatura d’Unitat Popular (CUP) daría pie a iniciar una hoja de ruta que lleve a una Cataluña independiente en 18 meses.
Ambas formaciones soberanistas no sumaron conjuntamente el 50 por ciento de los votos, quedándose según los resultados provisionales con el 47,32 por ciento, lo que muestra la división de la región en torno al tema de la independencia.
Durante las proyecciones
Un sondeo elaborado por Metroscopia y difundido por la televisión pública regional dio entre 74 y 79 escaños a las dos listas independentistas, con un 49,8% de los votos.
Unas mil personas se reunieron en una plaza de Barcelona, ante el antiguo mercado del Born, donde la coalición presuntamente vencedora Junts pel Sí (Juntos por el Sí) instaló su carpa para seguir la noche electoral.
Ante los primeros resultados, reaccionaron con gritos de «independencia» y aplausos y entonaron el himno de esta región nororiental de 7,5 millones de habitantes.
Emoción
«La sensación que tenemos por los datos disponibles apunta a que esta mayoría soberanista clara y nítida a favor de la independencia de Cataluña es un hecho», dijo uno de los directores de campaña de Junts pel Sí (JxS).
«Hemos conseguido hacer el plebiscito que no nos dejaban hacer y esto lo acredita la gran participación», celebró, en referencia a la oposición del gobierno español de Mariano Rajoy a permitir un referéndum de autodeterminación.
Los electores se volcaron en la cita con las urnas y a las 18H00 (16H00 GMT) -dos horas antes de cerrar los colegios- la participación alcanzaba el 63%, siete puntos mas que en los últimos comicios de 2012.
«Junts pel si» está integrada por el partido CDC del presidente regional Artur Mas, la izquierda independentista ERC, asociaciones y personalidades de la región.
Su compromiso es emprender un proceso de secesión para constituir un Estado independiente en 2017 si los independentistas conseguían una mayoría parlamentaria.
Para ello necesitarán el apoyo del pequeño partido de izquierda radical CUP, también independentista pero reacio a apoyar a Mas, conservador y responsable de políticas de austeridad, como presidente.
Dados los resultados, se puede afirmar que la ´´pelota´´ está en la cancha del gobierno español y porque no decirlo de Europa. Y es que ha llegado la hora de actuar y pasar de las palabras a los hechos. Una consulta autonómica no es en modo alguno un plebiscito aunque esa haya sido la motivación del líder separatista el señor Mas ; el Tribual Constitucional ha dejado claro que ninguna provincia española se puede independizar del Estado español y quebrar la unidad del país ; el señor Mas aspira a la independencia de Catalunya pero presidiendo el la Generalitat, recibir todos los beneficios de España, y de igual modo con Europa. Como si no hubiese pasado nada y que cualquier sacrificio adicional, sea el mínimo posible y que sean otros los que asuman los costos principales : el ´´lomito´´ como quien no quiere la cosa ; y el otro factor, es que dentro de Cataluña, no menos de la mitad de la población, no solo se opone a la independencia sino que ante cualquier consulta, la idea que ha predominado no es la secesión sino el obtener mayores beneficios autonómicos. Esto último, será el factor que puede revertir cualquier aventura si se hacen las cosas como deben hacerse.
Vendrán intensos procesos de negociación dentro de las diferentes fuerzas separatistas e independentistas en Cataluña ; hay sectores de la burguesía local interesados en la independencia y dispuestos a pagar el precio en función de apetencias personales ; se presumen intereses foráneos como lo son los de Rusia y China para llegar al corazón de Europa y afianzar sus planes imperiales ; y sobre todo, un ir en contra de la gestión del PP y el señor Rajoy, que han logrado recuperar económicamente a España pero pagando un alto precio social que ha facilitado que grupos de Indignados hayan sido cooptados inicialmente por Podemos y sus dirigentes fundamentales y que en cualquier caso, han determinado que en las próximas Generales españolas se impondrá una política de pactos y alianzas que nos están diciendo a gritos que le ha llegado la hora a España de darle un giro a su forma de conducir al país.Adaptarse a las nuevas realidades y tiempos. No le queda otra.
El gobierno español ya debería el ir estableciendo los contactos dentro y fuera del país, a objeto de ir creando los planes de contingencia necesarios para abortar cualquier intento separatista e independentista por parte de Cataluña y bloquear cualquier injerencia por parte de potencias extranjeras no – occidentales, que intentasen oxigenar la continuidad del movimiento independentista. No hacerlo, sería estimular otros intentos separatistas de provincias que están observando la experiencia catalana y sacando sus propias conclusiones. Y es que recrear parecidas situaciones a las que condujeron a la Guerra Civil y a la casi desintegración de España, se deben combatir hasta con el uso de la fuerza si fuese necesario. Poner en peligro la UNIDAD de España sería casi tan grave como un acto de traición y como tal debe ser abordada tal amenaza. ¡ Para mañana es tarde !.
Comparto la brillante opinión de Pons, y apenas le agrego que Artur Mas es un poco más que el presidente actual de la Generalitat, él es el vagabundo que ayudó a sofocar el escándalo de Corrupción de sus camaradas de partido, la familia Pujol, probablemente para que no se ramificaran esas indagaciones y llegaran -a donde finalmente llegaron- a su propio esquema de Corrupción, exigiendo y recibiendo el ahora famoso 3% de cada Contrato que otorgaba el gobierno Catalán (además de la arrogancia implícita en haber creado EMBAJADAS de Cataluña en varios países, con dinero que le enviaba el Banco Central de España, con el cual tienen un MONO de dimensiones gorilescas ahora). Junto a Romeba y Junquera, son los tres chiflados tras la propuesta de separarse de España (el LEÓN) para pasar a ser «Cataluña independiente» (un RATÓN, siete millones y medio de personas -más de la mitad están siendo forzadas a esa secesión- que podrían iniciar la debacle, la balcanización de la madre patria, para satisfacer los caprichos de unos pocos pretenciosos).