Santa Lucía niega cualquier intromisión en su voto sobre Venezuela en la OEA
El Gobierno del pequeño territorio caribeño de Santa Lucía negó este viernes cualquier intromisión exterior para condicionar el sentido de su voto en la resolución sobre la situación en Venezuela aprobada en la última asamblea general de la Organización de Estados Americanos (OEA).
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Santa Lucía remitió una declaración a Efe en la que se señala que el voto del país en la OEA tiene como objetivo favorecer un diálogo abierto sobre la situación en Venezuela.
El comunicado apunta que el Gobierno de Santa Lucía está satisfecho de participar en diferentes procesos de diálogo sobre Venezuela, lo que ha favorecido un lenguaje más templado dentro de resoluciones y declaraciones pasadas hacia ese país.
La resolución, aprobada el pasado martes en la 48 asamblea de la OEA, abre la puerta a iniciar una vía para la suspensión de Venezuela del organismo, aunque el país petrolero ya solicitó de manera voluntaria su salida en abril de 2017, un proceso que se estima que concluirá el próximo año.
Contra ella votaron San Vicente y las Granadinas, Venezuela, Bolivia y Dominica, y se abstuvieron Nicaragua, Belice, Surinam, Trinidad y Tobago, Haití, Antigua y Barbuda, El Salvador, Ecuador, San Cristóbal y Nieves, Belice, Uruguay y Granada.
A favor estuvieron EE.UU. y los 14 países del Grupo de Lima (Argentina, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guyana, Guatemala, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Perú y Santa Lucía), a los que se sumaron Bahamas, Jamaica, Barbados y República Dominicana.
La declaración subraya que la situación que se vive en Venezuela tiene que ser solucionada dentro del país mediante un diálogo constructivo y las soluciones acordadas por los diversos actores, además de dejar claro que Santa Lucía rechaza cualquier intervención exterior.
La declaración matiza que la situación actual en Venezuela es crítica como lo demuestran todos los informes internacionales, además de citar varias áreas de preocupación para Santa Lucía, incluida la migración desde el país sudamericano al pequeño territorio caribeño, lo que según se apunta afecta a su seguridad.
«Todos los esfuerzos hasta el momento, incluidos el del Vaticano y los de este hemisferio que han incluido la participación de México, Chile, San Vicente y las Granadinas, más recientemente las negociaciones celebradas en la República Dominicana, no han logrado solventar la crisis política», subraya la declaración.