Resurge caso de abuso sexual que involucró a embajador de Maduro en Grecia

De nuevo sale a la palestra pública un escándalo que en su momento involucró a un antiguo diplomático de la gestión de Nicolás Maduro en Grecia. Y es que el Ministerio de Justicia griego dio este jueves permiso para que una extrabajadora de la embajada de Venezuela en Atenas se lleve material del edificio de esa representación, como una manera de compensar su despido tras haber denunciado un caso de abusos sexuales por parte del entonces embajador oficialista, Franklin Ramón González.

La mujer griega, que trabajó como cocinera en la embajada entre octubre de 2012 y julio de 2013, denunció a González por abusar sexualmente de ella en varias ocasiones, así como de acoso verbal, situación que se habría repetido con otras cinco compañeras. Únicamente ella y otra mujer llegaron a denunciar los maltratos recibidos por Franklin Ramón González, que contaba con protección diplomática.

González, sociólogo, con Doctorado en Ciencias Sociales en la Universidad Central de Venezuela, fue director de la Escuela de Estudios Internacionales en esa misma casa de estudios.

Indemnización

Según el Ministerio de Justicia, los objetos que se lleve no deben impedir el correcto funcionamiento de la embajada.

El Gobierno del partido conservador Nueva Democracia, que comanda el primer ministro Kyriakos Mitsotakis, decidió otorgarle a ella el permiso para requisar objetos de la embajada, que no ha pagado la indemnización que le corresponde a la afectada por su despido.

Al ser preguntada sobre el caso, Fiona Sampson, consejera de la embajada, dijo que «de momento, no tenemos ningún comentario al respecto, estamos a la espera de más claridad por parte de las autoridades«. Actualmente, la representación de Maduro la lleva como encargado de negocios Freddy Fernández Torres.

El Gobierno de Mitsotakis reconoce a Juan Guaidó como presidente encargado de Venezuela, quien tiene como embajador en territorio heleno a Eduardo Massieu Paredes.

La carta

Lo cierto que el episodio generó una tormenta política en Grecia. Nueva Democracia acusó este jueves al partido izquierdista Syriza de «hacer cualquier cosa por encubrir el caso y de llamar al secretismo «madurez política«.

Esta crítica hace alusión a una carta enviada en marzo de 2013 a Nicolás Maduro por Alexis Tsipras, entonces líder de la oposición griega y que luego se convertiría en primer ministro, en la que indicaba que si los abusos se hacían públicos los medios de comunicación «lo aprovecharían para dañar a la izquierda, tanto en Venezuela como en Grecia«.

«Quería llamar tu atención sobre un tema delicado del que espero tu contribución y actuación para solucionarlo de la mejor manera; se trata del problema que ya conoces con el nuevo embajador en Atenas. Hasta ahora el personal de la embajada ha demostrado madurez política y no tomará medidas en Grecia, algo que haría público el problema«, escribió en aquella vez Tsipras, carta recogida entonces en medios locales.

Maduro respondió llamando al embajador a Caracas, quien volvió durante un tiempo a Grecia hasta abandonar el país oficialmente. En el interin, la extrabajadora de la embajada venezolana fue despedida.

El partido de izquierdas Syriza respondió a las críticas asegurando que Tsipras redactó y envió la carta a petición de las trabajadoras y que fue gracias a su intervención que González dejó el puesto.

Del mismo modo, se apunta que la mujer aseguró que un miembro de Syriza le pidió resolver el asunto de forma interna y mostrar «madurez política«, por lo que Nueva Democracia ha exigido a la formación política que aclare quién hizo estos comentarios.

Los medios griegos se han hecho también eco de otra carta enviada por la antigua empleada a Maduro, en el que explica que el comportamiento de González provocó a ella y a sus compañeras «un estrés negativo y prolongado con el resultado de pánico, síntomas depresivos, miedo, inseguridad, desesperación, crisis de llanto, irritabilidad«, entre otros daños.