Las hipótesis en el caso Ronald Ojeda, el teniente que estaría secuestrado en Chile
Tres secuestros extorsivos en menos una semana marcan un hito en la criminalidad en Chile, hasta 2016 eran delitos escasos perpetrados solo entre miembros de bandas criminales. Promovidas sobre todo por bandas transnacionales, si en la Región Metropolitana de Santiago, entre 2016 y 2020 hubo entre seis a ocho casos por año, en 2021 llegaron a 26. El salto fue en 2022, cuando se registraron 46 casos. A noviembre de 2023 sumaban 45, según información de la Policía de Investigaciones (PDI).
El caso del exmilitar venezolano Ronald Ojeda Moreno ha sido, hasta ahora, diferente. Es por eso que el Gobierno de Gabriel Boric y la Fiscalía se hayan alineado al señalar que no descartan ninguna hipótesis, pero las autoridades barajan al menos cuatro. Una de ellas es la posible intervención internacional, pero a la misma altura que un eventual secuestro extorsivo, un secuestro ligado a alguna banda o hasta un autosecuestro.
La tendencia de secuestros es que a las 48 horas de la denuncia, se pida rescate, el de Ojeda Moreno no fue así. También se apunta al lugar, un piso 14, y el horario en que se produjo (de madrugada) y no en la vía pública, pues en la mayoría de las situaciones las víctimas son subidas a la fuerza a un vehículo. Es, además, la primera vez, desde el alza de estos delitos, en que los captores van de policías.
La denuncia del secuestro en Chile del venezolano de 32 años, fue reportada por su familia primero a Carabineros y luego a la Policía de Investigaciones. Ocurrió a las 3.15 de la madrugada del miércoles, en un edificio en el municipio de Independencia, en el sector norte de Santiago.
De acuerdo con el video de las cámaras de seguridad, tres sujetos con uniformes de la PDI, con supuestos chalecos antibalas, cascos oscuros y los rostros tapados, llegaron hasta su departamento en el piso 14 y se lo llevaron. Un cuarto se quedó con el conserje. Ojeda iba descalzo y solo con su ropa interior. En el estacionamiento se ve un automóvil color gris con una baliza color azul.
En paralelo a las indagatorias, al mediodía del miércoles el excomisario Iván Simonovis, opositor al régimen de Nicolás Maduro, a través de su cuenta de la red social X publicó el nombre de Ojeda, a quien identificó como un teniente. Fue quien apuntó a una operación orquestada por la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM). En su publicación adjuntó un vídeo, supuestamente del momento en que exmilitar es sacado desde su departamento.
Pero no fue hasta la noche del miércoles que el Gobierno chileno confirmó el hecho. Lo hizo el subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, quien en todo momento se refirió a Ojeda como un “ciudadano venezolano”, sin mencionar su calidad de exmilitar.
“Efectivamente hubo un secuestro de un ciudadano venezolano durante la madrugada, como ya creo es de conocimiento público, en la comuna de Independencia”, declaró Monsalve y enfatizó que la Fiscalía declaró la investigación como secreta. “Acá lo que importa es el resguardo de la integridad de la eventual víctima y de su familia”.
Ronald Leandro Ojeda Moreno se instaló en Chile en 2017. En sus redes sociales ha sido un activo opositor al régimen venezolano. La Administración de Gabriel Boric no ha confirmado si tenía o no la calidad de refugiado político, pese a que se difundió que sí la posee desde fines de diciembre de 2023. Con respecto a esto, Monsalve dijo que por ley es una situación que no se puede revelar.
Ojeda, teniente primero retirado y con entrenamiento como comando, es uno de los 33 militares de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) que fueron expulsados y degradados el pasado 24 de enero, cuando el ministerio de Defensa de Venezuela publicó un listado en el que figuraba su nombre. Entonces se explicó que los militares estaban implicados en acciones “criminales y terroristas” contra Nicolás Maduro, y que enfrentaban cargos por “traición a la patria”.
El embajador de Chile en Venezuela, Jaime Gazmuri, está gestionando una conversación con el viceministro para las Américas de la Cancillería venezolana. Según la portavoz de Gobierno, Camila Vallejo, debido a que se trata de un “hecho de suma gravedad”, se han mantenido contactos con Caracas a todos los niveles: de Gobierno, policial y a través de las fiscalías correspondientes. A raíz del caso, el Ejecutivo chileno solicitó este miércoles a Interpol una alerta internacional, además del resguardo de las fronteras del país tanto terrestres, como marítimas y aéreas.