Pakistán y Afganistán se comprometen a reponer confianza
Autoridades afganas y paquistaníes acordaron en una reunión en Kabul «restablecer la confianza» entre ambos, tras las acusaciones de Afganistán contra el país vecino de apoyar a los talibanes, informaron este sábado medios locales.
El asesor de Seguridad paquistaní, Sartaj Aziz, afirmó a su llegada a Islamabad, tras reunirse el viernes con el presidente afgano, Ashraf Gani, que los dos estuvieron de acuerdo «en restablecer la confianza, poner fin al juego de acusaciones y crear una atmósfera positiva», según Pakistan TV.
Aziz dijo que trasladó a Gani su «preocupación» por las recientes acusaciones de las autoridades de Afganistán contra Pakistán, la última de ellas hecha ayer por el propio presidente afgano durante la inauguración de una conferencia internacional en Kabul, publicó Efe.
«Los líderes paquistaníes transmiten deseos de paz, pero se enfrentan al reto de controlar las fuerzas que creen que un inestable y débil Afganistán es preferible a un vecino fuerte y seguro», sentenció Gani, que no dio detalles sobre la reunión con Aziz.
Un portavoz del Ministerio de Exteriores afgano, Ahamad Shekib Mustaghani, confirmó este sábado a Efe que en la reunión entre el asesor de Seguridad paquistaní y el presidente se habló de poner fin a las acusaciones mutuas y de la restauración de la confianza.
Aziz remarcó que la paz en Afganistán solo se alcanzará «con el diálogo», pero reconoció que no está claro «cómo y en qué condiciones» deben restablecerse esas conversaciones.
Representantes del Gobierno y de los talibanes afganos mantuvieron su primera y única reunión oficial a principios de julio en Pakistán, que actuaba como intermediario en un proceso de paz ahora en suspenso.
La agencia de inteligencia de Afganistán anunció el lunes la detención de 30 miembros de la red insurgente Haqqani y del Consejo de Peshawar por su supuesta implicación en una serie de ataques en Kabul que causaron en agosto una treintena de muertos y decenas de heridos, la mayoría civiles, y los acusó de estar radicados en Pakistán.
A raíz de esos atentados, la agencia afgana acusó directamente a las Fuerzas Armadas de Pakistán de liderar a los talibanes afganos y de perpetrar ataques a través de su «marioneta», la facción talibán conocida como red Haqqani.