Obama prepara suspensión de sanciones contra Irán
El presidente estadounidense, Barack Obama, pidió formalmente a su gobierno preparar la suspensión de las sanciones estadounidenses contra Irán, en virtud del acuerdo nuclear firmado el 14 de julio por Teherán y las grandes potencias.
La jornada de este domingo, calificada de «jornada de adopción», marca el fin del periodo de 90 días que siguió a la adopción por el Consejo de Seguridad de la ONU de una resolución que aprobaba el pacto diplomático.
«Pido por la presente tomar todas las medidas suplementarias apropiadas para la aplicación efectiva de los compromisos estadounidenses enumerados» en el acuerdo nuclear, declaró Obama en un memorándum dirigido a los responsables pertinentes de su administración (Diplomacia, Tesoro, Comercio y Energía).
Irán tiene que empezar a desmantelar una gran parte de su infraestructura nuclear, un proceso de varios meses al término del cual las sanciones occidentales podrán ser efectivamente suspendidas.
Otras acciones
Está previsto que la Unión Europea anuncie este domingo preparativos similares.
«Este día es importante para todos nosotros, y una primera etapa crucial en el proceso para que el programa nuclear de Irán sea exclusivamente pacífico«, declaró el secretario de Estado John Kerry en un comunicado.
Las directivas del presidente Obama son publicadas «para que la gente sepa lo que se va a suspender«, precisó el sábado a los periodistas un alto responsable estadounidense bajo petición de anonimato.
Washington también quiere demostrar a Teherán y a sus aliados su determinación de cumplir el total de sus compromisos.
A la espera
«Ninguna sanción se ha levantado» este domingo, informó un responsable estadounidense.
La fecha de suspensión efectiva de las sanciones dependerá de la parte iraní. «No creo que tome más de dos meses«, dijo otro responsable de Estados Unidos. «Para nosotros, es más importante que lo hagan bien a que lo hagan rápido«.
Sin embargo, a los iraníes les interesa hacerlo rápido con el fin de recuperar decenas de miles de dólares de fondos congelados en los bancos extranjeros, y de dar aire de nuevo a una economía asfixiada.