Militares en retiro rechazan posibilidad de detener ofensiva contra las FARC
El presidente de la Asociación de Oficiales Retirados de las Fuerzas Militares de Colombia (Acore), Jaime Ruiz, rechazó hoy la posibilidad de que el Gobierno acepte un cese el fuego bilateral mientras se negocia con las FARC.
Dicha propuesta fue planteada hoy en varias entrevistas radiofónicas por el excanciller israelí Shlomo Ben Ami, uno de los asesores del presidente colombiano, Juan Manuel Santos, con quien participó este fin de semana en unas reuniones en Cartagena (norte) en las que se analizó el estado del proceso de paz.
Las conclusiones de esos encuentros, en los que el equipo negociador del Gobierno se ha replanteado su actitud en los diálogos para acelerarlos, han abierto la puerta a que, a juicio de este consejero, sea posible alcanzar pronto un alto el fuego entre las partes.
«La posibilidad de que no haya terrorismo y se pueda llegar a un cese al fuego bilateral es más cercana que antes. Los avances en las negociaciones indican que la desconexión entre la guerra en Colombia y lo que se está negociando en Cuba se tiene que acabar», dijo Ben Ami.
Aunque esta posibilidad no ha sido oficialmente respaldada por la Presidencia, los militares de la reserva ya reaccionaron a través del general retirado Ruiz, quien afirmó que la Fuerza Pública no debe bajar la guardia ante la guerrilla hasta que esta no se desmovilice, lo que llegará solo después de que se alcance un eventual acuerdo.
«Por norma legal y constitucional las Fuerzas Militares deben cumplir la tarea que les corresponde. Mientras esta organización (las FARC) esté armada de manera ilegal, constituye una amenaza y como amenaza hay que enfrentarla», afirmó Ruiz a la emisora Blu Radio.
En el país rige desde el 20 de diciembre el alto el fuego unilateral e indefinido de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que han repetido en numerosas ocasiones que para favorecer el avance de los diálogos debe darse un alto el fuego bilateral.
El Gobierno y la guerrilla negocian la paz en La Habana desde hace 25 meses, tiempo en el que han logrado preacuerdos sobre tres de los cinco puntos de la agenda, referidos a propiedad de la tierra, participación política y drogas ilícitas.
Se espera que las parten vuelvan a la mesa de conversaciones este mes para retomar y cerrar el cuarto punto, que aborda el reconocimiento y reparación de las víctimas del conflicto armado y abrir el último, que comprende la desmovilización y la dejación de armas por parte de los guerrilleros.