Los acuerdos para que el PP gobierne en España siguen en el aire
La «alianza» de los conservadores con la ultraderecha pone en aprietos al Partido Popular para que gobierne en España, después de que los nacionalistas vascos reiteraron su rechazo a cualquier acuerdo que incluya a la extrema derecha.
La posibilidad de que el PP, que ganó las elecciones pero sin mayoría suficiente, alcance los apoyos necesarios para gobernar en España sigue en el aire.
Y con este ambiente de verano oscuro, el líder del PP, Alberto Núñez Feijoó, no va a gobernar España porque los españoles no le han dado el apoyo que él creía que iba a tener según las encuestas. Feijóo no va a gobernar porque el resto de grupos parlamentarios no aceptan que su socio preferente sea Vox. Feijóo no va a gobernar porque cada día está más sólo dentro y fuera del PP.
Pedro Sánchez (PSOE) y Yolanda Díaz (Sumar) se entienden, Feijoo (PP) y Abascal (VOX) no; pero además Feijoo, el PP, no se entiende con ningún otro actor del Congreso, lo cual hace su situación insostenible en una lógica parlamentaria.
Recordemos que el partido conservador logró 137 escaños en el Congreso de los Diputados español en los comicios del pasado 23 de julio, por 121 del partido socialista (PSOE) del presidente en funciones del Ejecutivo español, Pedro Sánchez.
Alberto Núñez Feijóo, busca apoyos para sumar los 176 votos que le darían una mayoría absoluta para gobernar, superando los que pueda alcanzar Sánchez con otras fuerzas de distinto signo.
Sin embargo, el Partido Nacionalista Vasco (PNV) reiteró su rechazo a prestar a Núñez Feijóo sus cinco diputados para ser investido si a la vez recibe el apoyo del ultraderechista Vox, que la semana pasada manifestó su disposición a darle sus votos sin pedir a cambio entrar en un hipotético Gobierno con el PP.
La extrema derecha tiene 33 diputados, la coalición de izquierda Sumar 31, el independentista Esquerra Republicana de Cataluña 7, el también independentista catalán JxCat otros 7, los independentistas vascos de EH Bildu 6, el PNV 5 y 1 cada uno el Bloque Nacionalista Galego, Coalición por Canarias y Unión del Pueblo Navarro.
El PP sumaría 177 votos, uno más que la mayoría absoluta, con los apoyos de Vox, PNV y regionalistas navarros, que confirmaron su respaldo, y canarios, aún por decidirse.
Por su parte, Sánchez contaría con Sumar, una suma de fuerzas de izquierda que incluye a Podemos, formación con la que gobernó hasta ahora en coalición, pero está por ver si también facilitarían su nueva investidura otros grupos como independentistas catalanes y vascos, que es muy difícil por las exigencias de ambos.
Además, los socialistas recurrieron la decisión del órgano electoral de quitarles un escaño en Madrid para dárselo a los conservadores, tras una revisión del recuento.
Ese escaño es clave para ver si el líder socialista necesitaría el voto o solo la abstención de JxCat, partido de Carles Puigdemont, expresidente del Gobierno regional de Cataluña prófugo de la Justicia española tras la declaración unilateral de independencia de 2017.
España quiere acabar con la incertidumbre
Un acuerdo a derecha o izquierda, pues parece inviable un pacto entre conservadores y socialistas, evitaría una nueva cita electoral.
Núñez Feijóo insistió el fin de semana en acabar con esta “incertidumbre”, al defender que gobierne el más votado evitando un “bloqueo y repetición electoral».
El rey Felipe VI, un papel decisivo
Tras la constitución del Parlamento el próximo 17 de agosto, comienza un proceso en el que el rey Felipe VI, como jefe de Estado, tiene que proponer un candidato para que intente formar Gobierno, que necesita mayoría absoluta en primera votación o simple en segunda.
Si no se logra como máximo dos meses después de la primera votación, el país estaría avocado a nuevas elecciones.