La relatora de la ONU llama a Camboya a cumplir los Acuerdos de Paz de París
La relatora especial de las Naciones Unidas para Camboya, Rhona Smith, instó al Ejecutivo camboyano a cumplir con los Acuerdos de Paz de París para mejorar la situación de derechos humanos, días antes del veinticinco aniversario del tratado.
En una rueda de prensa en Phnom Penh, Smith lamentó «el deterioro» de la situación política, criticó el sistema judicial por usar las leyes de forma «aparentemente discriminatoria» y exigió la liberación de presos políticos en Camboya.
«Creo que todavía hay elementos de los Acuerdos de Paz de París que no se han cumplido, particularmente aquellos relacionados con asegurar elecciones libres y justas, derechos humanos, y un poder judicial fuerte», indicó la enviada de la ONU.
Los Acuerdos de París, firmados el 23 de octubre de 1991, sentaron las bases de la transición democrática camboyana, tras el periodo del Jemer Rojo (1975-79) y la ocupación por parte de Vietnam (1975-89).
Smith se refirió también a la deportación de la investigadora española Marga Bujosa Segado, expulsada del país por supuestamente participar en protestas junto a otros activistas nacionales, según las autoridades camboyanas.
«No importa de dónde vienes, tienes derecho a expresar tus opiniones. Los extranjeros también deben actuar de acuerdo a la ley del país en el que están, pero esa ley debe respetar los derechos humanos internacionales», aseguró la académica, que es la tercera vez que visita el reino camboyano.
Desde que comenzó el mandato de Smith en marzo de 2015, Camboya ha pasado de un periodo de relativo entendimiento entre partidos a que decenas de políticos y seguidores de la oposición se enfrenten a procesos judiciales.
Según la ONG Licadho de Camboya, veinticinco presos políticos permanecen en las cárceles camboyanas desde julio de 2015.
La relatora británica pidió también una investigación «independiente, imparcial y transparente» del asesinato de un disparo del analista político camboyano Kem Ley, lo que su familia consideró un crimen político.
Smith advirtió de las dificultades que sufren las minorías étnicas, los indigentes, los presos y las mujeres en Camboya.
«Algunas comunidades de etnia vietnamita y ‘Khmer Krom’ que han vivido en Camboya desde hace generaciones, además de que fueron desplazados a causa del conflicto armado, parecen afrontar problemas con los registros de nacimiento y las tarjetas de identidad», mencionó Smith.