Fiscalía mexicana confirma datos de uno de los estudiantes secuestrados
El procurador mexicano, Jesús Murillo Karam, confirmó que el ADN de los restos óseos analizados por la Universidad de Innsbruck de Austria corresponden a Alexander Mora Venancio, uno de los 43 jóvenes desaparecidos en septiembre pasado en el sureño estado de Guerrero.
«De acuerdo con el resultado emitido por la Universidad de Innsbruck la muestra ósea de estudio corresponde a Alexander Mora Venancio, estudiante normalista de 21 años, quien pertenece al grupo de desaparecidos en los hechos del 26 de septiembre en Iguala, Guerrero», indicó Murillo Karan en una rueda de prensa.
El representante de los familiares, Felipe de la Cruz, informó anoche en un mitin multitudinario en la capital mexicana que los peritos forenses argentinos les habían confirmado la identidad de Mora Venancio, pero aseguró que continuarán su lucha para encontrar a los demás desaparecidos.
El procurador General explicó que, según el dictamen de la Universidad austríaca, solo en uno de los 17 fragmentos óseos enviados se logró extraer el ADN y que este corresponde con el «hijo biológico de Omar Mora Chávez, y hermano biológico de Omar Mora Venancio y de Hugo Mora Venancio».
Añadió que esa Institución comparó los resultados obtenidos de la muestra enviada, con los perfiles genéticos de los familiares que mandaron la Procuraduría General de la República (PGR) y el equipo forense argentino, y de ahí se obtuvo esta conclusión.
El procurador General de la República concluyó que esta «prueba científica confirma que los restos encontrados en una de las escenas coincide con la evidencia de la investigación y con la declaración ministerial de los detenidos».
Añadió que estos resultados ya fueron entregados a los asesores de los familiares de los desaparecidos y se pondrá más tarde a disposición de los medios, aunque precisó que la identificación positiva del ADN «refuerza la reconstrucción histórica de lo acontecido en Cocula.
La noche del 26 de septiembre pasado un grupo de policías locales dispararon contra decenas de alumnos de esa institución educativa por órdenes del entonces alcalde de Iguala, José Luis Abarca, ataques que dejaron seis personas muertas y otras 25 heridas.
Además, los policías capturaron a 43 jóvenes y los entregaron al cártel Guerreros Unidos, que se encargó de asesinarlos e incinerarlos en un basurero de Cocula para no dejar rastro.
Murillo resumió que hasta ahora suman 80 las personas detenidas, entre estas 44 policías de Iguala y Cocula, mientras que 16 personas son buscadas actualmente.
Además se arrestó a algunos jefes policiales, al alcalde José Luis Abarca y su esposa María de los Ángeles Pineda, así como al líder del grupo criminal Guerreros Unidos, Sidronio Casarrubias Salgado, y otros miembros de esa organización.
Indicó que la Fiscalía cuenta también con más evidencias que primero serán informadas a los padres de los jóvenes debido al compromiso asumido con ellos por el presidente Enrique Peña Nieto
Finamente, aseguró que se mantendrá abierta la investigación hasta detener a todos los culpables «tope donde tope», y sentenció que no permitirán la impunidad.