España plantea su malestar a delegado oficialista en Madrid por amenazas de Maduro
Así se lo manifestó la número dos del Ministerio español y responsable de Iberoamérica y el Caribe, Cristina Gallach al encargado de negocios venezolano, Mauricio Rodríguez Gelferstein
Momentos de tensión en las relaciones diplomáticas entre el Gobierno de Pedro Sánchez en España y la gestión que detenta el poder desde Miraflores. En este contexto, La Moncloa convocó este lunes al encargado de negocios del régimen en Madrid, Mauricio Rodríguez Gelferstein, para trasladar la decepción de España por la expulsión de la delegada de la Unión Europea en Caracas, así como la queja por las declaraciones de Nicolás Maduro criticando la visita de la ministra española de Exteriores Arancha González Laya a Colombia.
La número dos del Ministerio español y responsable de Iberoamérica y el Caribe, Cristina Gallach, planteó al representante madurista que la expulsión de Isabel Brilhante Pedrosa y las amenazas de Maduro contra el Ejecutivo español»no favorecen que se concrete el interés de España y de la Unión Europea de ser actores constructivos en la salida de la crisis«.
Según confirmaron fuentes diplomáticas, Gallach se reunió por iniciativa propia con Rodríguez Gelferstein en Madrid.
Ataque madurista
De esta manera, Madrid reacciona a la advertencia de Maduro de «revisar a fondo toda la relación» con España, luego de la visita de González Laya a la ciudad colombiana de Cúcuta, para comprobar la situación en la que están siendo acogidos miles de migrantes venezolanos.
«Ya basta de agresiones, ya basta de hipocresía, ya basta de abusos, ya basta de posiciones de doble rasero de la canciller española favoreciendo a los paramilitares colombianos, favoreciendo al Gobierno de Colombia«, dijo el sábado Maduro, quien advirtió de que responderá «de manera contundente a cualquier agresión que venga, sea de palabra, sea de acción, sea diplomática, sea política«
Posteriormente, González Laya, que no ha querido alimentar más la polémica, aseguró que no había ido a Colombia para criticar a Venezuela sino para «intentar, junto a la comunidad internacional, dar una respuesta a los ciudadanos venezolanos que han decidido abandonar su país y venir a Colombia en búsqueda de una mejor vida«.
Y sobre la situación política, la canciller se limitó a señalar que «España apuesta por el diálogo en un conflicto que tienen que resolver los venezolanos«.
En cualquier caso, no están previstas otras reacciones de la responsable de Exteriores del Gobierno de Pedro Sáchez, quien pidió «el mismo respeto que yo predico es el mismo respeto que yo exijo, ni más ni menos».
Deterioro progresivo
Las relaciones entre el Gobierno español y la gestión oficialista ha tenido diversos encontronazos en los últimos meses, especialmente luego de que el dirigente político Leopoldo López escapara en octubre pasado de la embajada de España en Caracas.
Por este hecho, Maduro y su canciller, Jorge Arreaza, acusaron al antiguo embajador de España en nuestro país, Jesús Silva, de ser «cómplice» en la fuga de López. Luego Madrid decidió bajar el rango de sus relaciones diplomáticas con Venezuela, para demostrar que las elecciones presidenciales de 2018 no fueron “justas ni transparentes”, razón por la cual España no reconoce la legitimidad ejecutiva de Maduro.
Ahora, la representación de España en el país está a cargo del diplomático Juan Fernández Trigo, en calidad de encargado de negocios, mientras que la embajada oficialista en Madrid no cuenta actualmente con un embajador acreditado, después de que el anterior responsable, Mario Isea, fuera relevado tras cumplir más de siete años en el puesto, por lo que Mauricio Rodríguez Gelferstein funge también como encargado de negocios.
