El papa pide que el recuerdo de Romero sea un mensaje de paz en Latinoamérica
El papa Francisco dijo este lunes que el recuerdo del santo Óscar Romero «es una oportunidad excepcional para lanzar un mensaje de paz y de reconciliación a todos los pueblos de Latinoamérica» al recibir a los salvadoreños que asistieron a la canonización del arzobispo de San Salvador.
Francisco recordó en su discurso a los cerca de 7.000 salvadoreños reunidos en el Aula Pablo VI del Vaticano que «las dificultades y el flagelo de la división y de la guerra y la violencia se han sentido con fuerza en su historia reciente».
«Pero este pueblo resiste y va adelante», añadió.
Tras señalar que «no son pocos los salvadoreños que han tenido que abandonar su tierra buscando un futuro mejor», destacó que «el recuerdo de san Óscar Romero es una oportunidad excepcional para lanzar un mensaje de paz y de reconciliación a todos los pueblos de Latinoamérica».
Explicó que «El Salvador vibra hoy por el gozo de ver a uno de sus hijos en el honor de los altares» y destacó que «sus gentes tienen una fe viva que expresan en diferentes formas de religiosidad popular y que conforma su vida social y familiar».
«El pueblo lo quería a Monseñor Romero, el pueblo de Dios lo quería. Porque el pueblo de Dios sabe olfatear bien donde hay santidad», añadió.
Para agradecer a los salvadoreños todo lo que han hecho por el arzobispo, Francisco eligió como representante del pueblo de El Salvador a Angelita Morales, asistente de Romero durante muchos años.
Francisco calificó a Romero como «un pastor insigne del continente americano» que «supo encarnar con perfección la imagen del buen Pastor que da la vida por sus ovejas».
Por ello, y ahora mucho más desde su canonización, indicó, «pueden encontrar en él un ejemplo y un estímulo en el ministerio que les ha sido confiado. Ejemplo de predilección por los más necesitados de la misericordia de Dios», les exhortó a los sacerdotes salvadoreños presentes.