Costa Rica aboga en ONU por asistir y proteger a los migrantes y refugiados
El canciller costarricense, Manuel González, abogó, este martes, por procurar «asistencia y protección» a los migrantes y refugiados de todas las regiones del mundo en lugar de recurrir al lenguaje de la división.
«La incidencia de conflictos intraestatales, la exclusión y la pobreza, la expansión del terrorismo y las tensiones de seguridad entre países, así como los efectos del cambio climático, entre otros, generan un número nunca antes visto de crisis humanitarias», dijo González en una intervención en el segmento de alto nivel de la trigésimo cuarta sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU.
Esas crisis, añadió, «provocan movimientos masivos de migrantes y refugiados en todas las regiones del mundo».
«Frente a esta situación, los Estados debemos procurar asistencia y protección, pero en lugar de tender puentes hoy se recurre más frecuentemente al lenguaje de la división», lamentó.
El canciller costarricense también dijo: «somos testigos de una escalada de posiciones que incitan a la intolerancia, a la discriminación, a la estigmatización, a la xenofobia y al racismo».
A su juicio, la noción de soberanía «no puede ser excusa para que la comunidad internacional enmudezca ante las violaciones contra los derechos humanos y las libertades fundamentales».
«La indiferencia no puede ser una opción frente al dolor humano, frente a la discriminación, que se convierte en violencia. No podemos repetir constantemente los yerros del pasado», demandó.
González abordó asimismo durante su discurso la libertad de expresión y de prensa.
«La libertad de expresión no es amenazada o limitada únicamente en zonas de conflicto. Mi país ve con preocupación los movimientos de Gobiernos que buscan coartar la libertad de expresión, mediante la limitación al acceso a los medios de comunicación y el desprestigio de la prensa», sostuvo el canciller.
En su opinión, «acotar los insumos para la prensa escrita, revocar las licencias a los medios de comunicación críticos al oficialismo, restringir periódicamente el acceso a redes sociales, son algunos de los preocupantes testimonios de acciones gubernamentales».
«Tengamos claro que, sin una prensa independiente, los ciudadanos no pueden ejercer plenamente sus prerrogativas básicas de acceder a la información y ejercer su derecho de opinión», recalcó.
Añadió que el problema no se detiene ahí, porque resulta «alarmante» la cantidad de casos de persecución y asesinatos de periodistas y otros trabajadores de los medios que quedan en la impunidad.
Costa Rica, dijo, es un país con una tradición de respeto a la libertad de expresión y por ello apoya la declaración de la Coalición de Libertad en Línea, emitida en Ginebra en febrero y que enfatiza en la importancia del respeto de los derechos humanos y las libertades fundamentales para el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales.
