China lamenta la retirada de EEUU del Consejo de Derechos Humanos de la ONU
China lamentó este miércoles la decisión de Estados Unidos de retirarse del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas, un órgano muy criticado por el Gobierno de Donald Trump al considerar que sirve de plataforma para países como China que, a su juicio, «no respetan» los derechos humanos.
«China aboga constantemente por el multilateralismo y el apoyo al Consejo de Derechos Humanos. Protegemos y promovemos los derechos humanos en todo el mundo», defendió un portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Geng Shuang, en rueda de prensa en Pekín.
Geng lamentó la decisión de EEUU de abandonar el Consejo, un organismo que permite el «diálogo, la cooperación, el intercambio y el aprendizaje mutuo en el ámbito de los derechos humanos», dijo.
La embajadora de EEUU ante la ONU, Nikki Haley, justificó ayer la retirada del Consejo por el «prejuicio crónico» del organismo contra Israel y por las posturas de países como China, Venezuela, Cuba o la República Democrática del Congo que, en su opinión, «no respetan» los derechos humanos.
El portavoz de la diplomacia china rechazó estas acusaciones y aseguró que «todos pueden ver la contribución de China» en la materia.
«Creemos que la mayoría de los miembros internacionales se oponen a la actitud de EEUU contra el Consejo de Derechos Humanos. El lado estadounidense es muy consciente de ello», añadió.
En el último informe anual del Departamento de Estados sobre derechos humanos publicado el pasado abril, EEUU señaló a China, Rusia, Irán y Corea del Norte como países que violan «a diario» los derechos humanos de sus ciudadanos.
Respecto a China, el informe apuntó que el Gobierno era responsable de «ejecuciones sin proceso», «desapariciones forzadas», torturas y «detenciones arbitrarias», unas violaciones que también han sido denunciadas en numerosas ocasiones por diferentes organizaciones internacionales.
La retirada de Washington es el último rechazo de EEUU a sus compromisos multilaterales después de que en los últimos meses haya abandonado la Unesco, el Acuerdo climático de París y el pacto nuclear con Irán.