Biden califica de «genocidio» matanza de armenios por el Imperio Otomano en 1915

En un hecho que puede aumentar las tensiones entre Washington y Ankara, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, describió este sábado como «genocidio» la matanza de 1,5 millones de armenios por el Imperio Otomano en 1915, una declaración que ya ha sido rechazada por el Gobierno de Turquía que preside Recep Tayyip Erdogan, señalando que no tiene basamento académico ni legal.

En un comunicado para conmemorar el 106 aniversario del inicio de esa masacre, que se cumple este sábado 24 de abril, Biden se convirtió en el primer presidente estadounidense en ejercicio que reconoce formalmente lo ocurrido como genocidio, algo que sus predecesores evitaron para no poner en riesgo la crucial alianza con Turquía.

«El pueblo estadounidense homenajea a todos aquellos armenios que fallecieron en el genocidio que comenzó en esta fecha 106 años«, dijo Biden en su declaración.

El presidente utilizó dos veces en el comunicado la palabra «genocidio«, cumpliendo así una de sus promesas electorales y llevando a término una fuerte campaña de presión de congresistas y grupos de estadounidenses de origen armenio que llevan años pidiendo que se use ese término.

En 2019, tanto la Cámara Baja como el Senado de Estados Unidos aprobaron medidas en las que describían como «genocidio» la masacre de 1915, a pesar de las advertencias del Gobierno turco de que eso dañaría gravemente las relaciones bilaterales.

Turquía reconoce la muerte de civiles armenios durante los intentos de deportación en 1915, pero los encuadra en un contexto bélico con Rusia en el este de Anatolia durante la I Guerra Mundial, y se niega tajantemente a aceptar el término de genocidio.

Homenaje al pueblo armenio

Biden explicó en su comunicado que su intención era «honrar» la memoria y el «dolor» de los inmigrantes armenios que llegaron a Estados Unidos tras la masacre, y de sus descendientes, que nunca olvidaron esa «trágica historia«.

«No hacemos esto para echar culpas, sino para asegurar que lo que ocurrió no se repite nunca«, subrayó.

El mandatario estadounidense destacó que el respeto a los derechos humanos es una de sus prioridades, así como construir «un mundo que no esté manchado por los males diarios de la intolerancia«.

«Renovemos nuestra determinación compartida de prevenir que ocurran atrocidades en el futuro, en cualquier lugar del mundo, y de potenciar la sanación y reconciliación«, concluyó Biden.

Estados Unidos se convierte así en el trigésimo país que reconoce hasta ahora como genocidio lo ocurrido hace más de un siglo, incluidos varios de Europa y Latinoamérica, además de Rusia y Siria, dos enemigos de Ankara.

Según fuentes oficiales, la decisión de Biden no derivará en la imposición de sanciones, pero sí se espera que debilite los vínculos con Turquía, cuyo presidente, Recep Tayyip Erdogan, mantuvo una relación cálida con Donald Trump, pero bastante fría con Biden cuando era vicepresidente de Barack Obama, entre 2009 y 2017.

Rechazo turco

Entretanto, Ankara, la capital turca, reaccionó rápidamente: El ministro de Exteriores, Mevlüt Çavusoglu, rechazó este sábado el uso del término ‘genocidio‘ utilizado por Biden, apuntando que «las palabras no pueden cambiar ni reescribir la Historia. No tenemos que aprender nada de nadie respecto a nuestro propio pasado«.

«El oportunismo político es la mayor traición a la paz y la justicia. Rechazamos completamente esta declaración basada únicamente en el populismo«, dijo el jefe de la diplomacia turca.

Asimismo, la Cancillería turca sostuvo que la declaración del presidente estadounidense «no tiene ninguna base académica ni legal ni se apoya en prueba alguna. Los sucesos de 1915 no cumplen ninguna de las condiciones para utilizar el término ‘genocidio’, definido de forma precisa en la ley internacional«, señalan

«Pedimos al presidente de Estados Unidos que corrija este grave error, que no sirve a ningún fin, salvo el de satisfacer ciertos círculos políticos«, agregó el Ministererio de Exteriores turco.