Arabia Saudita niega encuentro entre Netanyahu y el príncipe heredero Bin Salman
El Gobierno de Arabia Saudita negó este lunes la veracidad de las informaciones publicadas por medios de comunicación israelíes sobre una supuesta reunión entre el primer ministro de ese país, Benjamín Netanhayu, el príncipe heredero saudí, Mohamed bin Salman, y el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo.
El ministro de Asuntos Exteriores saudí, Faisal bin Farhan, afirmó en su cuenta de Twitter que «tal reunión no ocurrió«, agregando que en el encuentro celebrado el domingo solo estaban presentes «representantes americanos y saudíes«.
El histórico encuentro -primera vez que un jefe de Gobierno israelí habría viajado a Arabia Saudita- había sido confirmado por el ministro de Educación de Netanyahu, Yoav Gallant, quien señaló que «el solo hecho de que se haya producido y que se haya hecho público, es de gran importancia«.
Versión israelí
Según la prensa de Israel, Netanyahu viajó acompañado de Yossi Cohen, jefe del Mossad (los servicios de inteligencia israelíes) y la reunión tuvo lugar en Neom, ciudad futurista en el noroeste de Arabia Saudita, cerca de la frontera con Israel.
De acuerdo con la emisora estatal, Kan, el viaje tuvo lugar «en el marco de conversaciones para normalizar las relaciones con Arabia Saudita«, después de que Israel haya llegado a acuerdos en ese sentido, con mediación del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, con Emiratos Árabes Unidos, Bahréin y Sudán, en el marco de los denominados «Acuerdos de Abraham«.
Pompeo y Trump han sido los principales impulsores de los pactos de normalización de relaciones de Israel con los países árabes, y se han mostrado en el pasado convencidos de que más países seguirán los pasos de Emiratos Árabes. Trump, incluso señaló en septiembre que espera que «Arabia Saudita sea uno de esos países«.
En Twitter, Pompeo habló de su encuentro con Bin Salman en Neom, pero no hizo mención a la supuesta presencia también en la ciudad de Netanyahu.
Acercamientos
El pasado mes de agosto, Netanyahu anunció que Israel está manteniendo conversaciones secretas con múltiples Estados árabes. Al respecto, Arabia Saudita, al menos de forma pública, ha suscrito hasta ahora la tradicional posición de la Liga Árabe de no establecer vínculos con Israel hasta que no se resuelva el conflicto del Estado hebreo con los palestinos.
Recientemente el ministro de Exteriores saudí, Faisal bin Farhan, declaró que su país ha apoyado desde hace mucho tiempo la normalización con Israel, pero que para ello debe ocurrir algo muy importante antes: «un acuerdo de paz permanente y completo entre los israelíes y los palestinos, que haya un Estado palestino con dignidad dentro de las fronteras de 1967«.
Futuros escenarios
Por otro lado, tomando en cuenta la situación interna en Estados Unidos, por la cual Trump debe dejar la Casa Blanca el próximo 20 de enero en favor de Joe Biden, algunos expertos israelíes especulan que la administración saliente podría alentar el acuerdo entre Israel y Arabia Saudita antes de que el demócrata asuma la presidencia.
Se estima que Biden recibirá numerosas presiones, en especial del ala izquierdista del Partido Demócrata, por lo que se vería en una situación incómoda si alentara un pacto entre ambas naciones sin que se produjera una reforma de la situación de los derechos humanos en Arabia Saudita.
El enemigo, Irán
Cabe destacar que Israel y los Estados árabes del Golfo, así como Arabia Saudita, tienen en común un enemigo, Irán, la potencia chiita de la región.
Al respecto, Netanyahu, consideró este lunes que «no puede haber una vuelta atrás al pacto nuclear» con Irán, una apreciación aparentemente dirigida al presidente electo de EE.UU., Joe Biden, que podría volver a buscar un acuerdo con Teherán cuando asuma la presidencia.
«Debemos ceñirnos a una política intransigente para asegurar que Irán no desarrolle armas nucleares«, declaró el mandatario israelí.
