Crisis de institucionalidad en Venezuela: Un obstáculo para la democracia
En un capítulo más del ciclo ¿Por qué no salimos del túnel? se discutió la crisis de la institucionalidad en Venezuela que ha debilitado las bases de la democracia en los últimos años.
Tres juristas, Cecilia Sosa, Fermín Mármol García y Alejandro González Valenzuela, destacaron la intervención del poder ejecutivo en los demás poderes y la falta de separación de poderes como causas principales.
Para la exmagistrada Cecilia Sosa, en un país la institucionalidad existe para tener un gobierno próspero que garantice todos los Derechos Humanos reconocidos en su Constitución, sean políticos, sociales, indígenas, culturales, educativos o ambientales.
“La Constitución que nos rige en Venezuela desde 1999 tiene más de 111 derechos y todos los órganos del Estado están obligados a garantizar estos derechos, pero en Venezuela pasa algo particular, que está dominada por un conflicto que se da entre un régimen totalitario y la democracia constitucional”, explicó.
Por su parte, el abogado e investigador Fermín Mármol García enfocó su intervención en la importancia de ver el tema de la institucionalidad como un asunto científico.
En un contexto donde la Big Data se posiciona como una herramienta clave para comprender las necesidades de la ciudadanía y orientar las políticas públicas, Mármol García señaló que Venezuela enfrenta el desafío de reconstruir su institucionalidad para garantizar un sistema democrático representativo y funcional.
“La falta de institucionalidad va en detrimento de la ciudadanía”, se lamentó.
El abogado Alejandro González Valenzuela explicó que cuando se habla de institucionalidad, específicamente de institucionalidad democrática se hace referencia a uno de los componentes de la democracia representativa, la cual está conformada por dos componentes, la democracia constitucional o democracia para el pueblo, “que es la de las instituciones la del sistema de frenos y contrapesos institucionales que hacen posible el funcionamiento del Estado de derecho” y el otro componente es la democracia popular o electoral, “la de las elecciones, la de las decisiones de las mayorías y de los acuerdos y consensos en las sociedades democráticas”.
Para González, en Venezuela no hemos sido capaces de forjar una democracia representativa en semejantes términos. Y, a pesar de los esfuerzos que se realizaron en este sentido, no hubo la voluntad suficiente para fortalecer las instituciones, lo cual llevó a la actual crisis.
Ante esta realidad, el abogado destacó la importancia de promover una cultura institucional sólida que incentive la participación ciudadana y la formación en valores democráticos.
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