OpiniónOpinión Nacional

Los pueblos también confeccionan trajes

En las últimas décadas en mi país, Venezuela, la tiranía ha reafirmado una gran verdad: “Cada pueblo tiene el gobierno que se merece” (Joseph de Maistre, 1753-1821). Venezuela era un país rico, dónde a pesar de los intentos revolucionarios ejercidos por Cuba en el desembarco de Machurucuto de 1967 y el subsecuente derramamiento de sangre y la corrupción desenfrenada desde los años 70’s, nuestro país logró avanzar en el último cuarto del Siglo XX próspero y en relativa paz… comparado con todos sus vecinos sudamericanos.

Sin embargo, su gente era ingrata con las décadas de democracia que le nutrieron, como todo hijo de rico que cree que siempre la vida le mantendrá pegado de la teta, asegurándole pasar por arriba de los males existenciales que los vecinos padecen. Anidamos resentimiento en contra del sistema político, rabia hacia los políticos por la corrupción, sin reconocer que ambos los elegíamos al son de dichos populares como el del ’88: “los Adecos roban, pero dejan robar”. Paso a paso fuimos todos, aprovechando las oportunidades para sacar provecho de las fisuras en la corrupción y las prebendas para generar el patrón de un traje totalitarista: ellos son culpables de la injusticia que todos vivimos, quitemos a los que tienen “sin trabajar” y lo repartamos a los que se lo merecen: “nosotros”. Llegamos al final del Siglo XX a la orilla del “mar de la felicidad” del “Socialismo del Siglo XXI” sembrando discordia entre grupos, apalancando todo con resentimiento y aprovechando la codicia que había traspasado todos los estratos sociales, promovieron la creencia de que se puede construir la felicidad sobre la destrucción de “otra” clase social.

La realidad es que somos una sola clase: venezolanos.

Todos, sin excepción, estamos continuamente enfrentados ante dos tipos de tiranía: la exterior y la interior. Los gobiernos son dirigidos por personas y, como tal, son propensos a descomponerse y entrar en la barrena de la corrupción; generando todo tipo de limitaciones a la sociedad y penurias a los individuos. Es la ignorancia con trazos de degeneración moral y la inactividad política de la sociedad la que permite y en ocasiones hasta impulsa la tiranía exterior; ¿o vamos a debatir que fue la corrupción moral y deslice do toda una sociedad en el “cuánto hay ‘pa eso” la que causó la llegada de la tiranía?

Es la misma “ignorancia» la que gesta la tiranía interior: el individuo es regido por lo que desconoce de si, y genera a su entorno un habitad de hostigamiento hasta que reconozca su propia responsabilidad y tome la decisión de cambiar orientación y se dirija con determinación hacia algo trascendente en su vida.

No seamos tan rápidos a juzgar la necedad de los otros, estamos dónde estamos por la nuestra propia. Más bien investiguemos qué ha sucedido para que estemos dónde estamos y qué podemos hacer para cambiar nosotros… cuándo lo logremos, todo el mundo a nuestro alrededor cambiará.

Votar o no votar, ahí está la cuestión

Hay algunos que sienten que es una pérdida de tiempo ir a votar porque el CNE (institución que regenta el proceso electoral en Venezuela) tiene el traje hecho a medida de la dictadura; bueno, como casi todas las instituciones que pueden promover la evolución social o política en Venezuela. Pero no tomar una decisión es ya haberla tomado. No ir a votar en las elecciones más amañadas de la historia venezolana, con un país de rodillas y sin ninguna posibilidad de futuro, es decir, “todo está bien.” Como cuando no íbamos a votar antes de la dictadura, “total, ¿qué diferencia hace un voto?”… y así llegamos a donde estamos.

Cuando estamos en un hoyo hay dos cosas que debemos hacer: primero, dejar de cavar el hoyo más profundo, y segundo, no podemos pensar que un gesto que desafía la situación donde estoy es sólo un gesto. Un ejemplo de lo importante que son estas elecciones es que la tiranía está haciendo todo tipo de artimañas para obstaculizar las primarias de la oposición. ¿Por qué crees que dedica tanto tiempo y recursos a deshabilitar a candidatos y corromper a otros que se han postulado?

Quizás el mayor peligro es no darnos cuenta de que estamos en un hueco con un presente inmerso en mentiras y espejismos y sin futuro alguno. Hay unos básicos en la recuperación de una persona (o de un país) para transformar una realidad que le ahoga, primero que acepte que existe un problema, y segundo que decida actuar para cambiar la situación que le aprieta.

Para los venezolanos, las primarias del 22 de octubre son ese gesto. No importa el resultado, no importa cómo lo trate de vender o maquillar el régimen, es un gesto de salud y reafirmación de que hay otra manera de construir un país.

“No vamos a salir de la tiranía con votos”

Mi hija tiene 14 años, nació en Barcelona, España y es hija de una madre catalana y tiene una hermana menor que tiene solo 7. Ella me ha dicho varias veces que ella quiere ser venezolana. Hay dos cosas que hemos perdido de nuestros ancestros, y que también reconocí en mi abuela: ellos hacían lo que hacían no por el resultado o el beneficio, sino porque era lo correcto; y trabajaban para las generaciones que les seguían, tanto dando el ejemplo como teniendo la certeza de que construían algo trascendente para sus familias. Yo quiero un país decente y próspero del que mi hija, cuando crezca, pueda sentirse honrada de ser arte y parte.

Todas las tiranías acaban

Generalmente caen por una suerte de coincidencias y coordinación de errores de los regímenes y circunstancias políticas, sociales y geopolíticas. Alinear e influenciar éstas para que suceda la caída es complicado. Pero lo que sabemos es que luego del desplome, comienza un periplo incierto e inestable, que conlleva mucho esfuerzo sobrellevarlo, incluyendo el sacrificio de todos los grupos sociales y que sensiblemente puede apoyarse en unos ciudadanos moral y mentalmente capaces. Tenemos que prepararnos para ello HOY. Todos los “gestos” que apoyen un cambio y evolución hacia una mejor Venezuela, debemos apoyarlos y ser partícipes. ¡Pero no es suficiente!

Nuestra humanidad, sin esfuerzo propio, tiende a deslizarse al caos

En la difusión por televisión del discurso de Hugo Chávez, luego de ganar por primera vez la presidencia en 1998, recuerdo entonces que dije: “si hace la mitad de lo que dijo, Venezuela va a ser la Suiza de América Latina”. Él sabía lo que había que hacer, pero la dulce melodía del encantador de serpientes Fidel, hizo deslizar al caos a un hombre emocionalmente vacío y moralmente miope; y con él a toda una nación. Sin embargo, hemos llegado aquí no por Chávez, ni por el dictadorzuelo de una isla bananera, sino por nuestras decisiones, nuestras inacciones, nuestra propia corrupción como individuos en una sociedad que miraba su propio ombligo y beneficio.

Cambiemos eso, dejemos de segmentar nuestro país en tribus y castas, todos somos venezolanos y capaces de hacer que la vida no valga nada, que las mentiras se amplíen y difundan y que las oportunidades de mañana no existan.. somos capaces de hundir aún más a nuestro país en la devastación. Tengamos la certeza de que podemos ser un tonto útil para el régimen o para aquellos que tienen claro qué quieren y cómo lo quieren; cuando tú no tienes objetivos definidos, una estrategia y un plan de acción, eres parte del plan de otrotoma la decisión y sé el ejemplo de humanidad que nuestro país requiere para sobre llevar el caos que sigue a la caída del régimen.

El 22 de octubre es otro paso

No importa cuánto llueva, truene, relampaguee, o si la tierra se abra en dos… “aunque la naturaleza se oponga, lucharemos contra ella” y haremos que se alinee con nosotros en cada paso para cambiar la historia de nuestra bella y, en otrora, prominente patria. En el Siglo XIX Venezuela fue el ejemplo de América Latina y lo volveremos a hacer.

Desvistamos al régimen, esto sólo lo pueden hacer hombres y mujeres con estatura y peso específico, que tienen claro a donde ir… las Primarias del 22 de octubre son un gesto, puede que sea tu primer paso para cambiar tu propia vida y dejar de buscar tu beneficio personal y trabajar por una nueva Venezuela, aunque no veas la utilidad inmediata. Pero necesitamos cambiar los valores fundamentales que hoy tenemos: la honestidad, el trabajar por el bien común y formarnos como Venezolanos de Carácter Íntegro; estono lo puede hacer un gobierno, tenemos que hacerlo cada uno de nosotros… empieza a ser tú el cambio que nuestra Venezuela necesita.

Próximo martes…

Para enfrentar la oscuridad necesitamos fuego

No importa cuán densa sea la oscuridad, es impotente ante la más leve llama de luz; es la potencia de la luz la que marca la diferencia… no la oscuridad.

EL PUNTO a la i

El historial de la columna está en cdots.substack por si quieres revisar artículos anteriores.


Los comentarios, textos, investigaciones, reportajes, escritos y demás productos de los columnistas y colaboradores de analitica.com, no comprometen ni vinculan bajo ninguna responsabilidad a la sociedad comercial controlante del medio de comunicación, ni a su editor, toda vez que en el libre desarrollo de su profesión, pueden tener opiniones que no necesariamente están acorde a la política y posición del portal
Fundado hace 28 años, Analitica.com es el primer medio digital creado en Venezuela. Tu aporte voluntario es fundamental para que continuemos creciendo e informando. ¡Contamos contigo!
Contribuir

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Te puede interesar
Cerrar
Botón volver arriba