No conviene engolosinarse con el apoyo popular
El apoyo popular masivo es un factor fundamental para un cambio político, sin embargo, cuando se enfrenta una dictadura no necesariamente es el único factor que logrará que ésta salga del poder.
Hemos visto en el pasado grandes protestas populares en Cuba y en Nicaragua y allí siguen Ortega y Díaz Canel mandando y destrozando a sus respectivos países.
El apoyo popular debe ser un factor que sirva para crear una unidad superior de todas las fuerzas políticas, pero para eso es esencial articular fórmulas de consenso que lleven en una misma dirección basada en un pacto de gobernabilidad de todos los aspirantes. Por eso, las primarias deben ser el mecanismo, a pesar de las diferencias adjetivas -e incluso sustanciales, en el que todos se midan y de donde surja el verdadero liderazgo político opositor.
De allí, a través del voto popular, se sabrá quiénes tienen, y quiénes no, un verdadero apoyo, en otras palabras, esa será la verdadera encuesta que mida la relevancia de los distintos actores políticos.
Lo que más le agradaría en este momento al régimen es que se resquebrajen las primarias y que haya más de un candidato opositor aspirando a enfrentar a quién ellos consideren su mejor fórmula para 2024.
Por eso hemos señalado más de una vez que, como dijo el siglo pasado Churchill, al enemigo se le enfrenta en todos los terrenos, no necesariamente en el que más nos convenga.
El factor popular Impulsará el fortalecimiento de la organización del pueblo en función de consolidar la democracia. Se logrará si se atiende el interés en una población diisminuída.