Tradiciones que romperá Carlos III el día de su coronación
Carlos III ha querido hacer la diferencia y no seguir algunas de las reglas, la primera de ellas y que asombró mucho tiene que ver con su esposa Camila
El próximo 6 de mayo se llevará a cabo, en la Abadía de Westminster, la Operación Golden Orb, donde Carlos III, hijo mayor de la fallecida Isabel II, se convertirá oficialmente en el nuevo soberano del Reino Unido.
Sin duda alguna, será una ceremonia histórica y llena de tradiciones aunque el monarca ha querido salirse un poco del protocolo y dejar de lado algunas de las normas de la coronación, las cuales siguieron al pie de la letra los anteriores reyes.
Es decir que, aunque la Operación Golden Orb fue planificada desde hace tiempo para que no ocurrieran imprevistos que marquen este gran momento, Carlos III ha querido hacer la diferencia y no seguir algunas de las reglas, la primera de ellas y que asombró mucho tiene que ver con su esposa Camila.
Y es que -según la tarjeta de invitación a la coronación- luego de la ceremonia la mujer del monarca pasará a ser llamada reina Camila, es decir que se le quitará de su título la palabra «consorte», un término que se usa para indica que comparte el título por matrimonio, pero no las atribuciones del mismo.
Los nietos
Otra tradición a la que Carlos III le pondrá fin es la de no involucrar a familiares menores en la coronación y esta decisión también está relacionada con Camila y los cinco nietos de ella.
Lola, Freddy, Eliza y los mellizos Louis y Gus, acompañarán a su abuela en la Abadía de Westminster y serán los encargados de sostener un dosel sobre su cabeza durante el momento de la unción con aceite consagrado.
Esta tarea era realizada antes por duquesas, pero Camilla quiere que sea un momento muy especial y dijo «que no quiere duquesas. Ella quiere que sean sus nietos», según afirmó una fuente real al diario The Times.
Con esta decisión el soberano y su esposa buscan mostrarse como una pareja que se adapta a los cambios de la actualidad y quieren que sus hijastros y nietos estén involucrados en sus vidas y que formen parte activa de la familia.
Pero los nietos de Camilla no serán los únicos que tendrán un papel importante durante la coronación, puesto que Carlos III le asignó una tarea significativa a su nieto el príncipe George de 9 años, primogénito del príncipe Guillermo y segundo en la línea de sucesión.
Según confirmó Buckingham, el príncipe será uno de los cuatro pajes de honor que acompañarán al soberano en la ceremonia de coronación, de esta forma rompe también con una de las tradiciones en las que los herederos sólo eran espectadores en el evento, así como lo fue el propio monarca durante la coronación de su madre Isabel II.
Código de vestimenta
Carlos III también cambió el código de vestimenta de los miembros de la familia real y de los invitados. Según fuentes, esta decisión la tomó porque no estaba conforme con la forma de vestir de las coronaciones pasadas.
Aunque Carlos III continuaría con la tradición de portar costosas túnicas, tal como lo hizo la reina Isabel II el 2 de junio de 1953, cuando fue coronada, él no está de acuerdo con el código de vestimenta de los invitados ya que es muy estricto y debían lucirse las joyas y los trajes lujo.
El monarca no quiere que se vea a una monarquía anticuada que despilfarra dinero, en especial no quiere que las nuevas generaciones vean una mala imagen de ellos, por eso -según el exmayordomo del rey Carlos, Grant Harrold – el código de vestimenta para la coronación implicará»un cambio masivo en el protocolo real». «Este evento va a ser completamente diferente a la coronación de la reina Isabel II».
Los nuevos reyes sí usarán las tradicionales las túnicas de coronación, pero duques, duquesas y condesas no las usarán. Fuentes cercanas al palacio revelaron que los caballeros usarán trajes mientras que las damas lucirán vestidos elegantes. Además, posiblemente ninguna mujer de la familia real portará tiara.
El Carruaje
Por último, otra de las tradiciones que se sabe que romperán los nuevos reyes es la del uso del Carruaje de Estado Dorado, el mismo que uso Isabel II el día de su coronación, quien fue en el vehículo durante el recorrido, ida y vuelta, desde el palacio de Buckingham hasta Westminster, una experiencia que la monarca describió como «horrible».
Pero esto cambiará en el día de Carlos III, ya que según el palacio, él y Camila no viajarán en la lujosa carroza «Gold State», de 260 años, en el breve recorrido que harán desde el palacio de Buckingham hasta la abadía, sino que solo la usarán para el regreso al palacio después de la coronación.
El monarca y Camila han decidido personalmente hacer el viaje de ida, de unos dos kilómetros, en la carroza «Diamond Jubilee», la cual fue elaborada para celebrar los 80 años de Isabel II, en 2006, esto porque es más moderna, cuenta con calefacción y aire acondicionado.
Según el palacio de Buckingham la coronación «reflejará el papel del monarca en la actualidad y mirará hacia al futuro, al tiempo que se arraigará en tradiciones y pompas de larga data».