Algo tenemos que hacer
No podemos seguir dando vueltas en círculos. Insistir en más de lo mismo cuando sabemos que lo que decimos, o lo que queremos, no se hará realidad.
La realidad nos muestra que, para que se produzca un cambio, se requiere que todos los interesados, e involucrados, encuentren algún beneficio en esa nueva situación, que vista las circunstancias no pareciera que lleve consigo la desaparición de uno de los bandos enfrentados.
Siendo eso así, tal vez valdría la pena que ambos lados reflexionen sobre las palabra de Almagro plasmadas en dos artículos hace un mes.
Hay que entender que es indispensable encontrar nuevas fórmulas que permitan romper el círculo vicioso y ayuden a superar la crisis humanitaria, recuperar un verdadero crecimiento económico y una democracia funcional. Eso requerirá un esfuerzo colectivo y una capacidad de entendimiento de que nada se resolverá mientras persista el enfrentamiento estéril de querer anular al contrario.
Si se pudo en España a la muerte de Franco, si se pudo en Chile, en Sudáfrica, en los países de la antigua cortina de hierro, por qué razón no lo podemos lograr los venezolanos. Basta de tanta palabrerías y sigamos el sabio consejo de Carlos Andrés, Manos a la obra.
