En Chile triunfó la democracia
Lo importante de lo que ocurrió en Chile con el triunfo del Rechazo a la nueva Constitución, no fue una victoria ni una derrota sino, como lo afirmó el presidente Boric, un triunfo de la democracia.
Lo sucedido lleva como resultado principal que la sustitución de la Constitución de Pinochet tendrá que ser acordada con todas las fuerzas políticas de Chile, y no impuesta por una mayoría circunstancial.
La Constitución no debe resolver puntos específicos, ni intereses parciales. Debe ser una guía política que conduzca a la reconciliación y que permita al pueblo chileno resolver sus principales problemas, en paz y de manera consensuada.
Ahora vendrá un nuevo proceso constituyente y deberán elaborar un texto sensato y no esa heteróclita amalgama de intereses particulares que fue el texto sometido a la aprobación de los chilenos.
Ojalá, por el bien de Chile, que Boric entienda que, para lograr resolver los problemas, hay que tener la capacidad y la disposición de armar consensos y que las minorías circunstanciales no pueden ni deben imponer su voluntad.
