Incertidumbre, escaso crecimiento e inflación, proyecciones del mercado venezolano
“Desde el punto de vista macroeconómico la pandemia de la Covid -19 y la guerra en Ucrania logró que el mundo occidental experimentara varios cambios estructurales y grandes estímulos fiscales; lo que trajo como consecuencia una exacerbada desaceleración de la economía mundial que está entrando en lo que podría convertirse en un período prolongado de escaso crecimiento y elevada inflación”.
Así lo comentó Ricardo Hausmann, quien fue uno de los ponentes en el conversatorio “El impacto de la recesión mundial en Venezuela”, evento donde también fueron invitados los economistas Gustavo García y Francisco Monaldi; y el cual estuvo moderado por Emilio Figueredo para Analítica TV.
Para Hausmann “la economía mundial crecerá menos en los próximos años y abran situaciones delicadas en el mundo a consecuencia de los daños derivados de la pandemia y la guerra en Ucrania”.
Comentó que los países de bajos ingresos no tendrán acceso al financiamiento, sin embargo, “en América Latina no se experimentará grandes choques en materia de producción y en el caso de Venezuela si la demanda sube o baja el país no tiene capacidad de oferta, entonces, exportar no dependerá de la situación mundial”.
Al juicio del director del Centro para el Desarrollo Internacional “el país se encuentra completamente desconectado de la realidad económica mundial y por supuesto de algún financiamiento internacional. Mientras que Venezuela no ordene su esquema político y financiero, mientras que no regrese ciertas condiciones no veo mucha recuperación en el país. Venezuela no se arregló”, aseveró.
Francisco Monaldi habló sobre las perspectivas del mercado petrolero y sus implicaciones sobre Venezuela. “La producción de Venezuela cayó drásticamente en 2020 (a un mínimo de 340 mil bpd) por el colapso de los precios y las sanciones secundarias, pero luego se recuperó con el incremento de los precios y la ayuda de Irán”, explicó.
Para finales del 2021 – prosiguió- la producción petrolera se ubicó en 700 mil bpd alcanzando niveles cercanos a su potencial, luego se estancó en el primer semestre de 2022 y bajó en julio.
Para el experto en materia petrolera “si se flexibilizan las sanciones, Chevron podría más que duplicar su producción en 12-18 meses (+110-130 mil bpd) y otros socios de PDVSA podrían aumentar +50-60 mil bpd en el mismo periodo, con lo cual se llegaría a un nivel cercano a 1 millón de bpd”.
«Venezuela requiere de cambios sustanciales en materia económica y política para que se lograra una subida en la producción petrolera, sin embargo, se debe considerar otros factores como los internos de la realidad venezolana (luz, agua, capital humano, entre otros) para la reactivación real del sector petrolero venezolano«, advirtió Monaldi.
Por su parte, Gustavo García comentó que » el crecimiento de la economía mundial será muy lenta y comenzará a elevarse a mediados de 2023 (…) en el caso de América Latina se experimentó un leve crecimiento, sin embargo, las cifras obtenidas no son significativa y ese aumento no volverá a repetirse.
La región se encuentra en la situación vulnerable, el escenario actual obliga al aumento de las tasas de intereses y esto repercutirá sobre los indicadores macroeconómico y el resultado será un endeudamiento cercano al 72% para el 2022- 2023″.
«América Latina está obligada a ajustar sus políticas fiscales para lograr sobrevivir al tema del endeudamiento, en el caso de Venezuela no se proyecta un escenario positivo a mediano plazo», indicó.
Si deseas escuchar el conversatorio completo, por aquí lo dejamos:
