Bachelet asegura que las libertades cívicas siguen restringidas en Venezuela
Michelle Bachelet, alta comisionada de la ONU para los derechos humanos, indicó, durante la presentación de un informe de su Oficina, que en Venezuela las libertades cívicas siguen restringidas.
Bachelet informó que entre mayo de 2021 y abril de este año, el equipo documentó 166 casos de restricciones indebidas, lo que incluye casos de criminalización y amenazas contra voces disidentes, además de 34 violaciones de la libertad de expresión, en las que destacan acoso, censura y confiscación de equipos profesionales y el bloqueo de portales web.
Asimismo, el informe revela que se usa una legislación antiterrorista y contra el crimen organizado para impedir el trabajo de defensores de derechos humanos y periodistas.
Algunas mejoras
No obstante, la funcionaria alegó que se han reportado algunos avances. No se han registrado muertes en protestas pacíficas relacionadas, principalmente, con la situación socioeconómica. Se documentaron menos detenciones arbitrarias, y se determinó que hubo «menos muertes en el contexto de operaciones de seguridad que en años pasados», aunque enfatizó que «una sola muerte es demasiado».
Bachelet también resaltó la disolución de las Fuerzas de Acción Especial (FAES), recomendación que había formulado en el pasado a la administración de Maduro. Comentó que ésta es una oportunidad para «reforzar la naturaleza civil de las fueras de seguridad».
Mencionó el procesamiento de militares y policías involucrados en siete muertes en las protestas de 2017, así como el hecho de que el fiscal general haya compartido información sobre algunos casos.
Sistema Penitenciario
El equipo de la oficina de Bachelet visitó entre mayo de 2021 y abril pasado, 21 centros de detención, realizó 259 entrevistas confidenciales con detenidos y se obtuvo la liberación de 68.
Sin embargo, persiste la preocupación por las condiciones en las prisiones de Helicoide y Boleita, donde consideró que hay riesgo de malos tratos y de detenidos incomunicados. Denunció que las autoridades ya no permiten el acceso del personal de su organismo a esos dos centros de reclusión, ni a locales militares de detención.
Bachelet recordó que este es el último informe que presenta ante el Consejo de Derechos Humanos sobre Venezuela, pues el 31 de agosto concluirá su mandato como alta comisionada de la ONU.
Durante su periodo, la Oficina de Derechos Humanos consiguió establecer un diálogo con el gabinete de Maduro, que recientemente aceptó ampliar a 16 el número de empleados de esta entidad en Caracas.
*Con información de Efe
