Barinas es Venezuela
Lo que ha sucedido en Barinas respecto a las elecciones regionales es un mal chiste que amarga a toda Venezuela. La oposición mostró que es débil, el Régimen ratificó que es un abusador. Si se entregaba la gobernación a un opositor hubiese sido mal negocio político para el régimen, pero le hubiera dado un respiro de confianza al sistema. En Barinas la oposición mostró que depende de lo que el Régimen quiera, el Régimen mostró que, como es usual, está dispuesto a cualquier trampa.
Las elecciones en Barinas han sido una fiesta con música mala y comida podrida. Lo más probable es que, aún con esa pantomima de candidato, el chavismo se adueñe de otro estado. Lo que si es seguro es que perderá la poca credibilidad que podía quedarle. Tal vez, como aseguran algunos, todo sea una lucha interna del chavismo. Pero el resultado ha sido peor. Todos pierden. Todos perdemos.
O sea, colocaron las bolsas clap.